En Dakota del Sur, Estados Unidos, varios civiles presenciaron una sádica detención por parte de un policía.
Un agente detuvo a un hombre y tras colocarle las esposas decidió días darle electrochoques con una pistola TASER.
A pesar de que el individuo ya estaba sometido, el uniformado le propino no una, si no varios descargas totalmente innecesarias frente a las miradas de varios peatones.
Los ciudadanos al ver la crueldad del acto decidieron intervenir y cuestionaron al agente sobre su acto, otros más se ofrecieron a ayudarlo a meter al hombre a la patrulla con tal de que dejara de torturarlo con su pistola de choques eléctricos.
Este caso se suma a la larga lista de denuncias presentadas contra miembros de la policía de diversas ciudades de Estados Unidos, un tema que continúa generando debate en la sociedad de aquella nación por las constantes ocasiones en que los agentes del orden abusan de la fuerza.
El oficial libera varias descargas eléctricas contra el detenido. (YouTube)
