El campo tuvo que ser limpiado por los más de 10 centímetros de nieve que cayeron la noche del martes. (Fotos de AP)
Podría calificarse como una pequeña ironía que justo antes del primer Super Bowl al aire libre y con frío, la gente al parecer menos intimidada ante la posibilidad de mal clima son aquéllos cuya tarea es proteger la superficie en la cual se jugará el encuentro.
No debería resultar una sorpresa, ya que los expertos de mantenimiento del terreno de juego de la NFL están acostumbrados a lidiar con la climatología, y a improvisar cuando tienen que hacerlo.
Ésta será la prueba para decidir si se realizan más Super Bowls en clima frío y al aire libre. Para toda esa atención adicional, Ed Mangan, el encargado de la cancha para el partido, comparó su trabajo al de un jugador de un linesman ofensivo, en el cual el anonimato es su propia recompensa.
"Nosotros preparamos el escenario para los jugadores y ése es nuestro trabajo; si uno no puede aceptar eso, uno no debería estar haciéndolo", dijo Mangan. "El mejor elogio es que nadie mencione el campo para nada; y si lo hacen, significa usualmente que algo está mal".
El MetLife Stadium, casa de los Giants y de los Jets de Nueva York, probablemente hará las cosas más fáciles para la NFL en un aspecto: tiene una superficie de juego artificial, lo que significa que la liga no tendrá que transportar en camión césped cultivado, como en Super Bowls previos.
La superficie artificial puede ser afectada por condiciones de nieve o hielo, pero es mucho mejor que el césped natural, según el pateador de los Jets Nick Folk.
Para el Super Bowl de febrero, la actividad previa al partido es la que puede causar problemas. Todos los ensayos preliminares, incluyendo la gala de medio tiempo y las celebraciones posteriores, suponen exigir la cancha hasta por 20 horas, o cerca de seis veces más del promedio de duración del juego.
Si el clima se pone feo, con nieve, antes de este Super Bowl, la cuadrilla de Mangan cuenta con aproximadamente 30 trabajadores, con ayuda de los empleados de los Giants, Jets y el MetLife Stadium para mantener el campo caliente y seco con calentadores y ventiladores bajo una lona impermeable.
El día del juego, estarán preparados con ventiladores poderosos, barredoras y palas en caso de que las líneas de yarda tengan que ser limpiadas. "El clima es nuestro mayor reto", admitió Mangan. "El clima es el eslabón más débil, es algo que no podemos controlar, pero es algo para lo que estamos preparados".