Vigilia. Peregrinos polacos tienen la bandera retrato del Papa Juan Pablo II durante una vigilia de oración en Piazza Navona
Cargando con un cuadro de Juan Pablo II que sólo saca de su casa en ocasiones especiales como ésta, María Luisa Torres admiraba emocionada las reliquias de uno de los pontífices que se convertirá en santo en sólo unas horas, Karol Wojtyla, el pontífice más querido en América Latina. "Ha hecho muchos milagros", aseguraba esta mexicana con ojos llorosos mientras paseaba por el improvisado museo ubicado en la Basílica de Guadalupe en el que se exponen sus reliquias.
Para María Luisa, igual que para otros muchos fieles en México, la Villa de Guadalupe ha sido el paso previo a la noche de vigilia y oración que se ha convocado en varios puntos de América Latina con motivo de la canonización de Juan Pablo II y Juan XXIII.
El pontífice polaco, que hizo 18 viajes a países latinoamericanos, es el Papa más querido en la región, a pesar de que algunas organizaciones de católicos se oponen a su canonización por considerarlo cómplice de pederastas.
Los asistentes podrán ver la canonización en directo a través de diez pantallas colocadas en distintos puntos de la catedral, pero no podrán entrar y salir del recinto "por motivos de seguridad".
En cifras
Es la primera vez que Benedicto XVI se une a Francisco para oficiar una misa pública desde que renunció.
* 600 sacerdotes darán la comunión en la Plaza de San Pedro.
* 93 delegaciones oficiales asistirán, entre ellos alrededor de 24 jefes de Estado.
* 20 líderes judíos de EU, Israel, Argentina, Polonia y Roma, asistirán.