Una niña pequeña de Kabul ha sido diagnosticada con poliomielitis, el primer caso vinculado con la capital de Afganistán desde la caída del Talibán en 2001, de acuerdo con las autoridades.
En respuesta al diagnóstico se lanzó una campaña de vacunación con un énfasis particular en el área del este de Kabul donde vivía la niña Sakina, de 3 años, informó el Ministerio de Salud Pública afgano.
Sakina sufre una parálisis parcial, dijo el martes el doctor Kaneshka Baktash, portavoz del ministerio. El diagnóstico fue efectuado en Pakistán, agregó Baktash, a donde la pequeña fue trasladada luego de enfermarse.
Afganistán, Pakistán y Nigeria son los únicos países del mundo donde la polio sigue siendo endémica, aunque en los últimos años ha disminuido significativamente en territorio afgano. Aun así, el origen de la gran mayoría de los casos en Afganistán puede rastrearse a Pakistán, señalaron funcionarios de salud.
Abdul Sabor Nariman, portavoz adjunto del Ministerio de Salud Pública, insinuó que ése fue el caso con Sakina e hizo notar que su familia viajaba con frecuencia al país vecino.
Las campañas de vacunación en Pakistán han sido blanco de extremistas, que han matado a varios trabajadores que combatían la polio y a policías que los protegían.
La rama del Talibán en Pakistán se opone a la vacunación contra esta enfermedad y considera que ese tipo de campañas son una fachada para realizar actividades de espionaje. Dice también que se aplica la vacuna con el fin de esterilizar a los niños musulmanes.
En Afganistán, el Talibán dice que respalda a los trabajadores de la Cruz Roja para que apliquen vacunas contra la polio en áreas controladas por los insurgentes.
Recientemente esta enfermedad ha generado atención en Oriente Medio, donde las Naciones Unidas realizan una campaña masiva de inmunización después que el mes pasado se confirmaron 17 casos de polio en Siria, país devastado por una larga guerra civil.