“Tenemos que alzar la voz, queremos una desviación de la obra, no se hagan bolas”, aseguró María Regina Palacios Bergé, habitante del fraccionamiento La Quebrada.
Unos 150 colonos marcharon por la autopista México-Querétaro para exigir a los gobiernos estatal y municipal que no pase por La Quebrada una tubería de 1.5 metros de diámetro de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM).
Los inconformes, que ocuparon dos carriles de la autopista, en el tramo que cruza por su comunidad, aseguraron que la tubería pasará por las principales calles de La Quebrada, lo que dañará viviendas, además de que disminuirá el caudal de agua potable que reciben.
“La CAEM quiere atravesar La Quebrada, hemos hablado con el edil y parece representante de la CAEM. Lo que queremos es que desvíen la obra y no lastimen comunidades”, dijo.
Añadió: “Es una obra que empieza ahora y acaba en 2027, atraviesa Cuautitlán Izcalli, Tultitlán, Coacalco y Ecatepec. Es un acueducto de agua que va para Cerro Gordo (Ecatepec)”.
Gustavo Gasca, también habitante de La Quebrada, mencionó que hasta el momento los colonos no han sido informados detalladamente del proyecto y el impacto que causará en la comunidad.
Dicha obra, de 34 kilómetros de longitud, se denomina Línea Metropolitana de Distribución de agua potable y pretende conectar el tanque La Providencia, localizado en un cerro frente a La Quebrada, con el Dren General del Valle de México, en Cerro Gordo, Ecatepec. Tendrá capacidad para tres metros cúbicos de agua por segundo.
El gobierno municipal informó que la tubería de 1.5 metros de diámetro estará a profundidad de entre tres y siete metros, además de que existe un seguro que garantizará cualquier afectación a los colonos.
Agregó que las obras en La Quebrada se prolongarían por tres meses e iniciarán la próxima semana, a pesar de la oposición de los vecinos.
Los colonos afirmaron que no permitirán obras en su comunidad y realizarán diversas movilizaciones, entre ellas bloqueos a la carretera Tlalnepantla-Cuautitlán y la vía López Portillo.
