Miles de brasileños se manifestaron en Río de Janeiro y Sao Paulo en contra de los militares en el 50 aniversario del golpe de Estado que dio paso a 21 años de una férrea dictadura castrense. (EFE)
Miles de brasileños se manifestaron hoy en Río de Janeiro y Sao Paulo en contra de los militares en el 50 aniversario del golpe de Estado que dio paso a 21 años de una férrea dictadura castrense.
En Río de Janeiro, dos manifestaciones, cada una con centenares de personas, en su mayoría identificados con símbolos comunistas y de grupos de izquierdas, confluyeron en la plaza de Cinelandia, donde se ubica el Club Militar, institución que aún defiende la legitimidad del golpe de 1964.
Después de dos horas de concentración pacífica, se registraron disturbios aislados, que la policía contuvo con gas pimienta y con el arresto de al menos dos manifestantes, según constató Efe.
El enfrentamiento entre los manifestantes y la policía comenzó cuando un grupo lanzó pintura roja a la fachada del Club Militar, que estaba cerrado, lo que propició la respuesta de los uniformados.
A las puertas del Club Militar, los manifestantes dibujaron la silueta de un cadáver, que rodearon de velas, para simbolizar las víctimas de la represión de la dictadura, y también quemaron una camiseta de camuflaje similar a la que usan los soldados del Ejército.
Entre otras consignas, el grupo exigió "cárcel para los fascistas del régimen militar" y gritó los nombres de algunos desaparecidos, cuyas fotografías en blanco y negro portaban en pancartas.
En Sao Paulo cientos de personas y representantes de diferentes movimientos sociales salieron a las calles del centro de la ciudad en rechazo al golpe, lo que obligó a interceptar la Avenida Paulista, una de las principales arterias del corazón financiero de Brasil.
Durante la protesta, diferentes grupos de manifestantes repartieron flores y fotografías de algunas de las víctimas de la dictadura, que el 1 de abril de 1964 derrocó al entonces presidente João Goulart.
"Estamos aquí para recordar a los que fueron callados, torturados y muertos. No olvidamos los muertos de ayer y pediremos justicia para los muertos de hoy, que son asesinados en las periferias del país", gritaron diferentes voces al inicio de la marcha.
Los manifestantes en la capital paulista aprovecharon también para pedir el fin de la violencia y represión policial.
