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Que no te sorprenda el fuego

Manténte alerta ante cualquier situación de incendio y evita el estado de shock

Que no te sorprenda el fuego

Que no te sorprenda el fuego

Ximena Martínez González

La casa y el lugar de trabajo son lugares donde se puede llegar a propiciar un incendio y por más pequeño que sea, si no es atendido rápidamente y de la manera correcta puede causar una catástrofe. El correcto uso de los extintores es básico para apagar por completo un incendio pequeño y prevenir el desarrollo de uno de mayor magnitud.

Jesús Padilla Reséndiz, asesor en seguridad industrial, explica que lo más importante en cualquier ocasión es estar alerta ante cualquier situación de peligro para saber reaccionar y evitar el famoso estado de shock. "Parece cosa difícil porque con 'estar alerta' pareciera que debemos dejar de hacer las cosas cotidianas. Esto no es así, no es actividad aparte o especial, es función natural de nuestro cuerpo, sobre todo si existe una experiencia previa desagradable", explica Padilla.

Extintores

El extintor está diseñado para atacar fuegos cuando están iniciando y para efectos prácticos se dividen en tres partes: cilindro o tanque, válvula y manguera.

El cilindro es un recipiente sujeto a presión, lo cual quiere decir que dentro contiene una presión mayor a la del medio ambiente. Dicha presión es nitrógeno, el cual sirve como agente que se expulsa al momento de presionar la palanca.

Donde se encuentra la válvula también hay un manómetro en la parte superior, el cual es una especie de reloj que tiene una flecha y un área verde, dicha flecha debe mantenerse dentro del rango verde. Si esto no es así, el extintor debe ser reportado para pedir un cambio. También en esa misma área, se encuentra un seguro metálico que basta con girarlo hacia cualquiera de los lados para romper la cinta que lo protege. Una vez fuera el seguro, el extintor estará listo para utilizarse.

La manguera es el conducto que sirve para direccionar el contenido del extintor. Debe tomarse con la mano más hábil y a la altura casi de la punta; si lo tomas de la manera equivocada, se puede descontrolar y hacer un desorden con el polvo.

Los alcances y presentaciones de los extintores varían, pueden ser del mismo material pero de diferente peso, con manguera o con corneta, la cual también sirve para direccionar.

Método de los cinco pasos

Padilla Reséndiz explica que este método se debe llevar a cabo ante cualquier situación de peligro con probabilidades de incendio. Como ya se mencionó, el uso de los extintores servirá sólo en la etapa inicial del incendio, antes de que salga de control.

1. Ubicar dónde se encuentra el extintor y asegurar que la flecha del manómetro se encuentre en el área verde.

2. Bajar el extintor y remover el seguro.

3. Controlar la manguera y cargar el equipo

4. Una vez frente al fuego, establecer distancia de seguridad.

5. Apuntar y disparar

Una vez utilizado el extintor, se debe retirar del área de peligro sin dar la espalda y recostar el extintor en un área donde no estorbe. Esta posición dará a entender a quien se encuentre cerca que dicho extintor ya ha sido utilizado.

TEXTO

¿Cómo se inicia el fuego?

Para que se genere un incendio deben existir tres factores: un combustible, oxígeno y un iniciador.

Combustible: Se puede encontrar en los tres estados de la materia (líquido, gas y sólido). Las características de cada uno son diferentes, todos los materiales arden de manera distinta.

Oxígeno: Es el principal alimento, puede ser el aire.

Iniciador: Puede ser una chispa, una llama directa, un corto, etcétera.

A falta de cualquiera de estos elementos, el fuego no existe.

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