El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, rompió hoy su agenda de actividades en Los Ángeles al realizar una visita sorpresa a un restaurante.
En su segundo y último día en esta ciudad del sur de California, el mandatario se mezcló con clientes de Canter Deli, en la avenida Fairfax, lo que causó asombro entre comensales.
Con una camisa arremangada y una enorme sonrisa, Obama saludó y compartió con algunos clientes, quienes aprovecharon para filmar videos con sus teléfonos celulares, mismos que rápidamente se convirtieron en virales en redes sociales.
A su llegada, el presidente estrechó la mano de cocineros antes de ingresar al área del comedor.
Uno de los comensales le preguntó por su forma de jugar baloncesto. Obama le confió que ha perdido su habilidad en el tiro y culpó de ello a su codo.
“Es mi edad; mi codo se va de lado. Me sale el ala de pollo cuando lanzo tiros”, bromeó.
Este jueves el presidente terminó su gira por el oeste de Estados Unidos, iniciada el martes en Seattle y San Francisco, y continuada miércoles y jueves en Los Ángeles.
En las tres ciudades encabezó eventos de recaudación de fondos para las campañas de candidatos demócratas en las elecciones intermedias de noviembre próximo.
