A la baja. La cartera de crédito del fisco federal se redujo en un 33.07 por ciento gracias al programa.
El Programa de Ponte al Corriente 2013 fue aprovechado por el 30.3 por ciento de los contribuyentes susceptibles de este apoyo, informó el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
De acuerdo con el SAT, de un universo de 365 mil contribuyentes morosos, 110 mil 810 pudieron ponerse al corriente con el fisco federal.
Los adeudos fiscales que tenían de 206 mil 813 millones de pesos hasta finales del 2012, fueron reducidos a un pago de 40 mil 335 millones.
Es decir, les fueron condonados 166 mil 479 millones de pesos -sin incluir lo perdonado a las entidades federativas-.
La cartera de crédito del fisco federal se redujo en un 33.07 por ciento, pues al inicio del programa era de 625 mil 268 millones de pesos lo que sumaban de adeudos.
Según el informe, las personas morales fueron las más beneficiados por el programa, el cual dio inicio en febrero del 2013, al condonarles 159 mil 620 millones de pesos, el 95.8 por ciento de monto total cancelado.
Aunque en número de contribuyentes fueron más las físicas las que se pusieron al corriente con el fisco federal.
De los 110 mil 810 contribuyentes beneficiados, 69 mil 397 fueron físicas y 41 mil 413 personas morales.
Las entidades con mayores montos condonados a los contribuyentes fueron el Distrito Federal, 97 mil 822 millones de pesos; Nuevo León, 27 mil 304 millones de pesos, y el Estado de México, 6 mil 4 millones de pesos.
Y las actividades productivas a los que pertenecen los contribuyentes condonados son principalmente del sector de financiero y de seguros, industrias manufactureras, servicios de apoyo a los negocios y manejo de desechos y de remediación, entre otros.
Piden que estímulos no afecten impuestos
La Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) pidió que los beneficios o estímulos especiales que otorguen a determinados sectores por la recién aprobada reforma fiscal no afecten la generalidad y legalidad de los nuevos impuestos.
El organismo autónomo llamó la atención de que, a unos días de la entrada en vigor de la reforma fiscal, se concedan a través de disposiciones no contenidas en las leyes recién aprobadas por el Congreso de la Unión, como decretos o reglas misceláneas, beneficios o estímulos especiales a determinados sectores de contribuyentes.
Afirmó que, si bien, acorde con lo dispuesto en el artículo 39 del Código Fiscal de la Federación, el Ejecutivo federal tiene facultades para conceder este tipo de estímulos, la reforma fiscal votada por el Congreso no podrá considerarse como estructural si no logra la modificación substancial del sistema impositivo.
Subrayó que ello necesariamente implica su simplificación, como lo ha apuntado la Prodecon en varias ocasiones, objetivo que difícilmente podrá alcanzarse si los pagadores de impuestos para conocer con precisión las obligaciones y derechos del régimen en que tributan, tienen que acudir no sólo a la ley sino a diferentes decretos o resoluciones.
Además, al concederse cualquier estímulo o beneficio especial debe cuidarse que se respete el mandato constitucional de generalidad y equidad en el pago de los nuevos gravámenes, consideró en un comunicado.