A la baja. La estimación de crecimiento para México en 2014 tuvo un ajuste a la baja de 2.6 por el Bank of América. (NOTIMEX)
Bank of America Merrill Lynch recortó el pronóstico de crecimiento económico de México de 3 a 2.6% para 2014, debido al menor dinamismo que registró el Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, así como los efectos negativos de la reforma fiscal sobre el consumo y la inversión.
En conferencia de prensa, el economista en jefe para México de la institución, Carlos Capistrán, dijo que a pesar del ajuste a la baja en las perspectivas para la actividad productiva nacional para los tres próximos trimestres las perspectivas son más favorables.
El experto comentó que es posible que el país tenga tasas de crecimiento del PIB superiores a 3% en el segundo, tercer y cuarto trimestres, impulsadas por el sector externo y el gasto público, principalmente.
"Esas tasas de crecimiento superiores a 3% dependerán mucho del rebote que registre la economía estadounidense. Se espera una aceleración en los próximos trimestres y a la luz de eso no se ve tan débil la segunda mitad en México", mencionó.
Sin embargo, reconoció que en el mercado interno, especialmente el consumo privado, persistirá cierta debilidad y su reactivación se dé en el último trimestre de 2014 o sea una "historia" del próximo año.
Para el año próximo, la institución financiera estimó un crecimiento económico para el país de 4%, donde ya incorpora los efectos positivos de algunas reformas estructurales como la energética y de telecomunicaciones.
Sobre las leyes secundarias en materia energética y de telecomunicaciones que se discuten en el Congreso, Carlos Capistrán mencionó que se espera su aprobación en julio o a más tardar agosto, las cuales darán certeza a los inversionistas nacionales y extranjeros para participar en ambos sectores.
Factores
Aplican ajustes a la estimación del PIB:
⇒ El impacto de un menor crecimiento en EU y la Reforma Fiscal en México obliga a realizar un recorte de 3 a 2.6%.
⇒ Para el segundo o tercer trimestre del año prevén tasas de crecimiento mayores al 3%, en base al sector externo y al gasto público.
