El presidente de la Mesa Directiva del Senado, el perredista Miguel Barbosa, respaldó el mensaje ofrecido por el presidente Enrique Peña Nieto, en el que instruyó al gabinete de Seguridad a dar con los responsables de los ataques violentos del 26 y 27 de septiembre pasados, en Iguala, Guerrero, que provocaron la muerte de seis personas y la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa.
En conferencia de prensa, Barbosa Huerta dijo que el anuncio del Ejecutivo no llega tarde pues corresponde a una posición política, toda vez que existe la posibilidad de que las fosas clandestinas encontradas el fin de semana en las inmediaciones de Iguala contengan cuerpos de los desaparecidos, "pero insisto sólo es una alta probabilidad porque no hay una confirmación oficial".
Acompañado por los vicepresidentes de la Mesa, Arturo Zamora (PRI), José Rosas Aispuro (PAN), y Luis Sánchez (PRD), el senador exigió el pronto esclarecimiento del asesinato y desaparición de estudiantes normalistas en Iguala, Guerrero, porque de lo contrario, dijo, este caso podría multiplicarse y trastornar al país.
Aseguró que el Senado, en su sesión de este martes, debatirá este tema porque la Cámara Alta no puede quedarse callada ante la magnitud de los crímenes en Guerrero.
Barbosa dijo que la federación debe mandar al Ejército y a la Gendarmería Nacional a Guerrero para poder generar una reacción, que es que lo espera la gente.
El legislador descartó que sea necesario enviar a un "comisionado" para la Seguridad como ocurrió en Michoacán por la infiltración del crimen organizado en las autoridades.
"Esa es una decisión que se toma en otro nivel (Ejecutivo), no en el Senado de la República, pero sin duda la experiencia de Michoacán, que fue en un principio adecuada, después ya no lo fue y no resuelves de fondo las cosas con un comisionado, que dígase lo que se diga, sí afecta la autonomía de un estado", consideró.
El presidente del Senado aseguró que se debe terminar la vinculación del crimen organizado con los servidores públicos en los tres niveles de gobierno, porque, sostuvo, hay evidencia acreditada de que la policía municipal de Iguala fue la que ejecutó a los estudiantes.