Votación. Los candidatos a la presidencia, Dilma Rousseff (izq.) y Aécio Neves (der.) hablan sobre el resultado de la ronda electoral. (AP)
Las elecciones de Brasil dieron otro inesperado giro ayer domingo cuando la izquierdista y actual presidente Dilma Rousseff se verá enfrentada a una segunda ronda electoral con un rival de centro-derecha, que en último momento dio un enorme salto del tercero al segundo lugar en la más impredecible justa electoral desde el regreso de la democracia al país en 1985.
La segunda vuelta se celebrará el 26 de octubre entre Rousseff y el popular exgobernador Aécio Neves, oponente de centro-derecha.
Con 99.5 % por ciento de los votos contados en la primera ronda electoral celebrada el domingo, Rousseff ganó un 42 % de los votos frente al 34 % de Neves, según los resultados del Tribunal Superior Electoral que supervisa la elección en el gigante sudamericano.
Rousseff, del Partido de los Trabajadores, no alcanzó el 50 % de los votos que necesitaba para hacerse a la presidencia sin tener que ir a una segunda ronda electoral.
Neves, de 54 años, fue gobernador del estado de Minas Gerais, el segundo más poblado del país. Superó de manera sorpresiva a la ex ministra de Medio Ambiente, Marina Silva, que hace tan sólo hace cuatro semanas tenía una ventaja de dos dígitos sobre el primero y parecía que se podría alzar con la presidencia del país más grande de América Latina.
El candidato opositor del Partido de la Social Democracia Brasileña estaba tan desanimado que llegó a bromear hace unos días al decir que su teléfono ya no sonaba. "Ahora cargo con tres celulares", le dijo al periódico Folha de S. Paulo.
Descendiente de una tradicional familia de políticos, Neves es nieto del expresidente electo Tancredo Neves, que fue el primer mandatario elegido democráticamente tras el régimen militar que terminó en 1985 y quien murió, sorpresivamente, un día antes de tomar juramentación de su cargo.
Neves fue gobernador de Minas Gerais durante dos mandatos hasta 2010 cuando dejo el cargo con un índice de aprobación de más del 90 %. Se inició en la política como secretario particular de su abuelo a los 21 años. Ayer domingo resaltó que esos lazos familiares que lo hicieron político.
"Lo que puedo decir, lo que me viene a la mente es lo que mi abuelo Tancredo dijo hace 30 años cuando ganó las elecciones a la presidencia de la república: 'No debemos dispersarnos. Estamos a mitad del camino'. Y espero ser capaz de caminar al lado de cada brasileño que quiere un gobierno digno y eficiente", dijo en un comunicado.
Neves se podría convertir en una real amenaza al intento de reelegirse de Rousseff pues obtuvo un 21 % de los votos y muchos de sus seguidores apoyarían al ex gobernador, según expertos consultados.
Afirma presidenta que la 'lucha continúa'
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, que ganó la primera vuelta de las elecciones presidenciales celebradas ayer, animó a sus seguidores a apoyarla en la nueva votación del próximo día 26 y afirmó que, ahora, "la lucha continúa".
Con el escrutinio casi finalizado, Rousseff tenía un 41.39 % de los votos y el socialdemócrata Aécio Neves recibía el respaldo del 33.78 % para confirmarse como su adversario en la segunda vuelta.
Rousseff, que asocia a Neves al "pasado" que el país vivió en el Gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), dio el tono de lo que será su campaña para la segunda vuelta al afirmar que "será la lucha de los constructores de futuro, que jamás dejarán que Brasil vuelva atrás".