El presidente hondureño Juan Orlando Hernández anunció hoy que impondrán todo el peso de la ley contra 22 miembros de la Tropa de Investigación y Grupo de Respuesta Especial de Seguridad (Tigres) por el robo de 1.3 millones de dólares.
La policía descubrió que un grupo de Tigres, cuerpo policial recién conformado por el gobierno de Hernández, se había quedado con 1.3 millones de dólares de un botín de 13 millones incautados a los hermanos Valle en el departamento de Copan.
Los hermanos Valle, actualmente detenidos en un batallón militar, listos para ser extraditados a Estados Unidos, tenían enterrados unos 13 millones de dolares en una de sus propiedades en el occidente de Honduras, de los cuales la policía sólo recuperó 11.3 millones de dólares.
De acuerdo al ministro hondureño de Seguridad, Arturo Corrales, tras una ardua investigación, fueron detenidos 22 miembros del Grupo Tigres.
"Di instrucciones de judicializar a todos los que están involucrados", dijo el presidente Hernández a través de la emisora local HRN.
"El mensaje es más que claro, quien participe en operaciones de seguridad, inteligencia, operadores de justicia, tienen que dar el ejemplo y si alguien comete un yerro se va a aplicar todo el peso de la justicia", advirtió el mandatario.
El ministro Corrales anunció también que los citados policías serán separados de la institución y llevados a los tribunales.
Por su parte, la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, lamentó que el ministro no haya presentado a la prensa a los acusados de haberse robado el dinero.
"Así como hace con los supuestos delincuentes que capturan, así deben presentar a esos policías", señaló Castellanos.