El primer informe del alcalde, Miguel Ángel Riquelme, vivió un ambiente de fiesta en el PRI, donde no faltaron los globos, tambores y hasta un grupo musical.
Los priistas cerraron la calle Morelos desde temprano, prepararon las banderolas y comenzaron la fiesta en la explanada, las lideresas bailando mientras otros apartaban lugar en el auditorio.
Riquelme llegó a las 10:00 horas y fue recibido entre porras, pancartas de apoyo y abrazos de los priistas, que le acompañaron hasta el auditorio, que lucía abarrotado, pues más de 600 simpatizantes esperaban escuchar el discurso.
La sorpresa fue la presencia del ex alcalde, Eduardo Olmos, a quien Riquelme se refirió como su gran amigo. La militancia ocupaba cada espacio libre en el auditorio, donde los tambores tocaban apretados, entre los aplausos y vitoreos de los simpatizantes, que agitaban sus globos rojos y blancos con cada palabra del edil.
La presentación duró menos de una hora y el edil se retiró, aún le faltaba la presentación oficial del informe.
Aunque estaba programado que iniciaría a las 12:00 horas, una gran cantidad de asientos estaban vacíos en el teatro Nazas, por lo que la presentación del informe arrancó 20 minutos después.
Acudieron representantes de las cámaras empresariales, secretarios del estado, delegados federales, funcionarios municipales y pocos ciudadanos, dado que el acceso fue muy restringido.
El cerco policiaco abarcó de una a tres cuadras a la redonda, en un operativo donde participaron tanto policías municipales, agentes de tránsito y vialidad, GATE, Policía Estatal y elementos que vestían de civil.
A detalle
Primer informe:
⇒ En el PRI, el informe fue un momento festivo que el alcalde, como primer priista de Torreón, compartió con la militancia.
⇒ En el Nazas, los invitados demoraron en llegar, lo que retrasó el evento, y el acceso estuvo muy restringido a los ciudadanos.
Festejo. El ambiente en el PRI era festivo, en el marco del informe, incluso en la explanada había un grupo musical.
