Mortal virus. Una mujer, lee todas las medidas que se deben tener para no contraer la enfermedad. (EFE)
El número de personas que han muerto tras contagiarse con el virus del ébola en África Occidental asciende a 467, según anunció ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La agencia sanitaria de Naciones Unidas ha contabilizado 759 casos de infección en los tres países que hasta la fecha han registrado contagios: Guinea Conakry, Liberia y Sierra Leona.
El último recuento dado a conocer por la ONU el pasado 23 de junio se elevaba a 399 decesos de 635 casos censados.
En un comunicado, la agencia sanitaria de la ONU explicó que según los análisis epidemiológicos llevados a cabo por la propia OMS, existen tres factores epidemiológicos que están contribuyendo a la transmisión del virus.
El primero es la transmisión en áreas rurales "facilitado por prácticas culturales muy fuertes y creencias tradicionales", en especial los ritos funerarios de lavar, abrazar y besar a los fallecidos; el segundo es el contagio en áreas urbanas densamente pobladas, especialmente en Conakry y en Monrovia; y la transmisión a través de los cruces de frontera entre los tres países.
Para controlar estos focos de transmisión, la OMS considera que es necesaria una respuesta muy contundente de los países, especialmente en las fronteras que comparten.
Parte de esta estrategia será debatida en la reunión de alto nivel que comienza mañana en Accra, la capital de Ghana, para debatir sobre la epidemia y las acciones urgentes que se deben implementar para frenarla.
En la cita participarán todos los ministros de Salud de la región, así como directores de control de enfermedades de 11 países.
Además de los tres afectados, los de Costa de Marfil, República Democrática del Congo, Gambia, Ghana, Guinea Bissau, Mali, Senegal y Uganda.