Veinticuatro estados en la Unión Americana coqueteaban ayer con el fantasma de una epidemia de influenza por el rebrote del virus del AH1N1, mientras los máximos responsables del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) reconocían que los más jóvenes y los adultos de mediana edad son los más afectados durante esta temporada en estados que van desde California y Arizona en la coste oeste hasta Florida, Maryland, Virginia, el Distrito de Columbia, Nueva York en la costa este. El hecho de que el virus que surgió en 2009 como la peor de las pesadillas vuelva a reaparecer con virulencia, mantiene con la guardia por todo lo alto a los responsables del CDC preocupados por el aumento de muertes que han comenzado a producirse a niveles epidémicos desde mediados de enero. "Estos resultados graves de la gripe son un recordatorio de que puede ser una enfermedad muy grave para cualquier persona, incluidos los jóvenes y los adultos previamente sanos", aseguró el portavoz de CDC Jason McDonald al resistirse a confirmar si, con el repunte de los casos de influenza y neumonía, EU se encuentran en la ruta de una epidemia generalizada.