Administrar las redes sociales no es algo que se aprende en un día. Es necesaria la constante capacitación, estar la tanto de las nuevas tendencias, comprender cómo las empresas que administran las mismas perfeccionan y cambian su funcionamiento y las reglas del juego, en fin, ser Community Manager es un trabajo de tiempo completo.
Facebook constantemente intenta estar a la par de las necesidades de sus usuarios y al darse cuenta que la gente ignoraba la creación de páginas (tema que para muchos aun no queda muy claro) permitió convertir un perfil de Facebook en una Fan Page. Asimismo permite la fusión de dos o más páginas, permitiendo al consumidor/seguidor de la marca, empresa o negocio, fijar su atención en un sólo canal, en un sólo sitio a través del cual la organización descarga sus noticias, promociones, publicidad, eventos, entre otros.
Tomar las riendas de las redes sociales de la empresa a la que se le trabaja, o tener una empresa que se dedique a brindar este servicio a otras es un asunto que exige un compromiso muy grande. Por eso es recomendable que tanto el contratante como el prestador del servicio se obliguen mutuamente mediante un contrato que establezca las condiciones del servicio y que deje muy en claro que la administración final de la página será del dueño de la empresa o negocio, previendo con esto un comportamiento falto de ética sobre todo por parte de quienes prestan estos servicios.
Desgraciadamente en nuestro país y concretamente en la Comarca Lagunera se han dado casos en donde la "empresa" prestadora del servicio secuestra la página de algún cliente que desea comenzar a administrar su página personalmente o bien cambiar de proveedor. Competencia siempre habrá y la existencia de la misma deviene en un beneficio para los clientes quienes deben recibir mejores servicios a un mejor precio, sin embargo lo que no es correcto es convertirse en víctima de un abuso por parte de quien en el pasado brindó un servicio.
Lo primero que debemos hacer en este caso es reportar nuestra página y contactar con un representante de Facebook para comenzar un proceso (algo tedioso) en donde debemos demostrar que somos los legítimos propietarios del negocio, tienda, establecimiento o local para recuperar nuestra página, acto seguido debemos reportar el abuso por parte del perfil personal del administrador o administradores de la página ante Facebook. Créanme funciona.
Por eso recomiendo a quienes estén pensando en confiar el manejo de sus redes sociales a un tercero que firmen un contrato de servicios en donde se establezcan dichos supuestos, pero sobretodo, que realicen una sencilla investigación de la empresa en cuestión y su cartera de clientes ya que la opinión que puedan brindarnos ellos sobre sus servicios es crítica para tomar una decisión.
La obligación fundamental de una empresa que se dedique a la administración de redes sociales es auxiliar en todo lo referente al tema al cliente, nunca dañarlo.
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