Una selección de futbol conformada por guardias suizos y empleados del Vaticano afrontará a un equipo de viejas glorias del Borussia Monchengladbach, en un partido que se disputará en Frankfurt, Alemania.
El encuentro se realizará el domingo próximo a partir de las 13:00 horas locales (11:00 GMT) en el estadio del Borussia. Entre las figuras que jugarán con la escuadra alemana destaca Hacki Wimmer, campeón mundial en 1974.
El equipo teutón lleva el nombre de “Hacki Wimmer 6 Friends”. Lo recaudado por la venta de entradas del partido amistoso será donado en beneficencia.
La iniciativa nació en el año 2011 y ya había sido aprobada por el Papa Benedicto XVI. Cuando el Papa Francisco supo de la misma “no hizo más que aplaudir”, dijo a la Radio Vaticana Guillermo Karcher, uno de los organizadores.
El sacerdote argentino e integrante de la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas del pontífice señaló que el espíritu de los partidos en el Vaticano es amateur y se disputan como momento recreativo sano.
“No sólo está el trabajo para quien es empleado en el Estado Vaticano, sino también un momento de encuentro con otras personas, no sólo del Vaticano o Italia sino, como en este caso, con el mundo alemán”, indicó.
“Sabemos que el deporte, cuando es practicado con el espíritu justo, se convierte en una escuela para la disciplina, para el respeto por quien juega, conmigo o contra mí en el equipo rival”, apuntó.