Con qué intención tan diferente se juega un partido de Copa Libertadores y eso se confirmó ayer en la cancha del Corona. Aunque el equipo de Pedro Caixinha aún adolece de varias cosas que iremos mencionando, lo cierto es que se logra ver una mejoría en Santos, aunque aún lejos de lo que puede ser su nivel.
Digo lejos porque Santos es muy afortunado en tener a Oswaldo Sánchez. Es cierto que cuesta tenerlo y que la directiva desde la llegada del arquero ha realizado un gran esfuerzo por mantenerlo, ya que no solamente es el portero del equipo, sino el capitán y la imagen del club. Sea como sea, Oswaldo ha tenido gratas intervenciones y de él mucho ha dependido que la parte baja no haya recibido más goles que los que actualmente tiene.
Otra buena noticia es el buen momento que está viviendo Araujo. No quisiera demeritar el trabajo de los otros defensivos, pues Abella, Figueroa y Lacerda han hecho una interesante labor a tal grado que sumaron tres partidos sin recibir gol (ya un cuarto, aunque no consecutivo, con el de Copa Libertadores) pero Araujo poco a poco se convierte en el líder del cuadro bajo y cuando se concentra y compromete, su gran altura pesa para defender a Santos. Sin embargo, esta última línea de pronto adolece de desconcentraciones y su gran punto débil es el juego aéreo, pues le rematan con facilidad y frecuencia y es ahí donde el mencionado Oswaldo ha salido al quite.
Quien se ha ganado la titularidad y ha sido un baluarte en el medio campo es Ribair Rodríguez. Cuando lo vi por primera vez ante Cruz Azul pensé que se había contratado a uno de los peores extranjeros de la historia, pero con actitud y buen futbol se ha ganado la media cancha y es sumamente participativo, es incluso elegante en el toque y se le ve constantemente recuperando balones o generando juego. Conforme el uruguayo ha mejorado, Juan Pablo también lo ha hecho, pues ni Crosas ni Calderón habían realmente marcado diferencia en ese sector como sí lo hace Ribair.
Finalmente había que tener paciencia para que la dupla Oribe- Darwin comenzara a carburar. Santos ha soportado el mal momento de ambos, cosa inesperada, pues normalmente es uno el que está mal y el otro rescata a su compañero. Esta labor la venía haciendo "Chuletitas" con una buena racha goleadora, pero las lesiones lo alcanzaron. No quiero decir que ambos estén al cien de regreso, pero el gol ante Arsenal al menos ya nos muestra un asomo de lo letales que fueron el año pasado. Mientras Pedro Caixinha forme a los once de forma congruente, con sus respectivos cambios lógicos, los resultados se irán dando. Pero que no haga lo contrario.
Twitter: @AlexRodriguezSa