Este hábito es la primera causa de fallecimiento prevenible, responsable de 3.5 millones de muertes en el mundo. (ARCHIVO)
El tabaquismo se considera una creciente epidemia en los países en vías de desarrollo, en donde se localizan 800 millones de fumadores; es decir, 75 % del total en el mundo, lo que ocasiona importantes pérdidas económicas a los hogares al destinar hasta 17 % de sus ingresos para la compra de cigarros.
Esta epidemia pasa casi inadvertida al convertirse en parte de lo cotidiano, provocando gastos a nivel mundial por casi 200 mil millones de dólares para la atención de los padecimiento ocasionados por el consumo de cigarrillos.
Este hábito es la primera causa de fallecimiento prevenible, responsable de 3.5 millones de muertes en el mundo.
No tiene fronteras ni limitaciones de género, edad o religión, además de afectar a todos los grupos sociales y representar uno de los factores de cáncer pulmonar, enfermedades isquémicas del corazón y cerebrovasculares; enfisema pulmonar y afecciones al recién nacido por el consumo de tabaco por parte de la madre.
Este pasado 31 de mayo, ante la alerta por el consumo de tabaco y sus efectos, la Organización Mundial de Salud celebró un año más el Día Mundial sin Tabaco.
Durante la celebración, se hizo un llamado a los gobiernos para que aumenten los impuestos a este producto, con el objetivo de desacelerar su consumo.