Abrevaderos. Los habitantes de cuatro poblados de San Juan de Guadalupe están disponiendo de agua para consumo humano.
En el municipio de San Juan de Guadalupe ahora son los habitantes de algunas comunidades quienes disponen de agua destinada al ganado y que se encuentra en los abrevaderos, "sólo la hierven, la filtran y le ponen cloro para poder tomarla", reconoció el alcalde Joel Delgadillo.
Son al menos cuatro los poblados que viven de esta manera desde septiembre del año pasado, cuando una avenida fuerte desbordó el río y azolvó el pozo de agua que abastece al sistema La Peña, que es el que suministra a las comunidades de Buenavista, Orégano, La Planilla y una cuarta más.
Desde el mes de septiembre, la gente de estas comunidades no cuenta con el servicio del agua potable y acude a los manantiales que existen cerca, o bien, a los abrevaderos.
"Ahora es la gente quien le tiene que robar el agua al ganado", dijo el alcalde Joel Delgadillo, quien refirió que para evitar enfermedades, la gente usa algunos filtros para limpiarla y luego la pone a hervir y le echa gotas de cloro, "hacen todo lo posible para poder consumirla", comentó.
Para evitar este problema se requiere arreglar y limpiar el pozo de agua que abastece a este sistema denomina La Peña, que a su vez lleva el líquido a las cuatro comunidades.
"El problema es que no tenemos recursos y se requieren dinero para el desazolve del pozo y arreglarlo porque toda la tierra y lo que arrojó el río dañó el equipo y se necesita rehabilitarlo totalmente y recursos no tenemos", puntualizó el edil.
Por ello, dijo que se está esperando que la Dirección Estatal de Protección Civil los apoye con recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) para poder solucionar este problema que afecta a poco más de 500 habitantes.