A pesar de que en su primera salida en los juegos de práctica le hicieron tres carreras por un jonrón sobre un cambio de velocidad, Manny Bañuelos y Yanquis están contentos del trabajo del pitcher de Gómez Palacio, Durango, en que logro luego sacar dos outs, uno con ponche. Bañuelos dijo que el brazo no le molestó para nada después de dos años de no haber estado en un juego y eso es optimista, así como la velocidad que le llegó a los 93 millas. Los Yanquis lo tienen proyectado para lanzar en la principal sucursal este año cuando apenas va a los 23 años pero al perder al veloz Boone Logan necesitan un importante zurdo en el bull pen y habrá un hoyo si el zurdo Thorton, que firmaron, está tan mal como hace un año con Boston. Bañuelos podría ser la salvación si termina fuerte en lo que resta de entrenamientos. Eso fue lo bueno del domingo.
Lo malo es que al ver por el Internet los juegos de Yanquis y Tampa Bay, así como Gigantes jugando contra Dodgers, vi cómo los llenos completos se habían evaporado para la séptima ya que muchos se habían ido. En el juego del Dodgers, Yasiel Puig dio un doblete y le robaron otro mientras salvó el juego Jean Machí, el exdiablo, pero es alarmante cómo la mayoría de la gente no se esperan hasta que termina el juego. La gente no era así antes, pero entonces los partidos eran de dos horas y media para que ahora sean de más de tres horas.
Los directivos no han hecho nada para bajarle tiempo a los juegos y ahora con las repeticiones aumentando van a durar más y la gente se va ir antes del out 27. La Liga Mexicana ha abandonado todos los intentos que hizo para quitar tiempo y no han hecho nada contra los managers que usan hasta ocho pitchers por juego, lo cual es un insulto y no estrategia de los catedráticos. Quitar los pitcheos de calentamiento a los relevistas bajaría media hora a los juegos ya que cada uno que llaman se lleva tres minutos de espera. O de otra manera hacerle la guerra a los managers de pacotilla permitiendo sólo dos relevistas en una entrada. Son ideas revolucionarias pero creo que algo hay que hacer para terminar con los juegos de tres horas o más que hacen que el aficionado se vaya a su casa en la séptima.
Y lo feo está en que para un juego en el hogar primaveral del Marlins el Boston se presentó con sólo jugadores de Ligas Menores, por lo que hubo protestas del Miami. Y el dueño de Boston, John Henry, que es un barbaján graduado, les contestó: "Vergüenza es el line up que ustedes ponen cuando comienza la temporada".
