El proyecto del Metrobús debe ser cristalizado lo más pronto posible. Los laguneros necesitan de un servicio de transporte eficiente debido al crecimiento poblacional de la región.
Torreón es la ciudad que mejores unidades tiene en la Comarca Lagunera, sin embargo, el servicio debe mejorar. Aún hay quejas de mal trato al usuario, de que las condiciones de algunas unidades no son adecuadas, ni la limpieza ni el manejo de las mismas por los choferes.
Aunque el proyecto es viable y necesario, deben verse primero las condiciones anteriores para que el plan redunde en una mejora integral del servicio.
Por años, administraciones han querido modernizar el transporte, pero poco se han ocupado de que el servicio sea de calidad y los que sufren siempre las consecuencias son los usuarios que sí deben cumplir con pagar el aumento que se les impone.
Hace unos días se informó que este sistema de transporte abarcará a los municipios de Matamoros y Torreón, Coahuila y Gómez Palacio y Lerdo, Durango, cada uno con sus terminales y rutas alimentadoras.
Se dijo además que el sistema de autobús de tránsito rápido (BRT, por sus siglas en inglés) para la zona metropolitana de La Laguna costará 6,200 millones de pesos y será financiado por el Gobierno Federal a través del Programa Nacional de Infraestructura 2014-2017, con apoyo del Programa de Transporte de Banobras.
Ante lo avanzado que se encuentra el plan, las autoridades municipales deben actuar para que los choferes y concesionarios, de las rutas alimentadoras, cumplan con un buen servicio o de lo contrario, el servicio general de transporte en La Laguna permanecerá condenado al fracaso.
Hace unos días, el director de Tránsito y Movilidad Urbana, Fernando García Tapia, reconoció el rezago que hay en el servicio y dijo que ya comenzó con un programa de reestructuración general de rutas, debido a que aproximadamente 50 colonias de Torreón, principalmente del sur y suroriente, pero también del norte, padecen un sistema de transporte público urbano deficiente, por la mala planeación y falta de control en los permisos para crear fraccionamientos.
Ante esto esto, a diario cientos de personas caminan largas distancias para tomar una ruta de transporte, que por lo general tiene recorridos largos, que obliga a usuarios al transbordo y por ende, un gasto doble de pasaje en su origen-destino.
No sólo se trata de que el proyecto llamado Metrobús funcione, sino que el servicio en su totalidad esté a la altura de las necesidades de la población del área conurbada.