Al menos tres de las 10 presas que controla la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Durango ya sobrepasaron su límite, la Caboraca en el municipio de Canatlán, la Peña del Águila, ubicada en el municipio de Durango, y la Santa Elena, localizada en Súchil, pero otras tres están en el 95 por ciento, Santiago Bayacora, Guadalupe Victoria y Francisco Villa.
Las seis presas, tanto las que están al tope como las que están por llegar a su nivel máximo, ya están vertiendo agua, algunas controladas y otras sin control por lo que los ríos y arroyos empiezan a subir su cauce provocando alerta en varias comunidades rurales que son cercanas.
Tan sólo durante el día de ayer, las 10 presas en el estado recibieron un total de 69 millones de metros cúbicos de agua, es decir, poco menos de la capacidad total de la Francisco Villa que está en Poanas.
De las seis presas que se les está extrayendo o que están derramando agua, en las últimas 24 horas vertieron a ríos o arroyos un total de 130 metros cúbicos por segundo logrando bajar un poco el porcentaje de almacenamiento. Al menos eso ocurrió en la presa de Caboraca que del 104 bajó al 102 por ciento.
