Gran parte del día lo dedica a entrenar a niños jóvenes y adultos, desde nivel básico hasta el alto rendimiento. (Fotos de Erick Sotomayor)
Deportista por pasión, vocación y convicción, Francisco Javier Arturo Hernández Castro, mejor conocido en el medio deportivo como 'Cacho', se ha constituido como todo un personaje en los medios de atletismo y triatlón, donde se desempeña como entrenador, actividad que ha desarrollado desde hace 30 años a favor de la niñez y juventud de la Comarca Lagunera.
Papá de tres tres hijas (Luisa Oralia, Christian Valeria y Marisol), 'Cacho' dice pasará una parte del 'Día del Padre' con dos de ellas, ya que la otra vive en España, pero será al terminar sus actividades del trabajo relacionadas con el deporte, ya que se trata de una actividad muy celosa, que demanda tiempo y atención de su parte.
"Amo a mis hijas y las tengo siempre presentes, pero no creo haber sido un buen padre, considero que no les dediqué todo el tiempo, ni tuve con ellas todas las atenciones que yo hubiera querido ofrecerles cuando eran chicas. El trabajo me absorbe la mayor parte del tiempo, por lo general me levanto muy temprano y termino muy tarde; así es esta actividad, muchas veces me reclamaban mi ausencia y yo les explicaba lo demandante de mi actividad, se ponían celosas de mis alumnos a quienes según ellas yo les daba mi tiempo.
Hoy que ya crecieron, creo entienden mi ausencia del hogar y saben lo difícil que es estar lejos de los hijos por tener que cumplir con nuestro trabajo y el buscar cada día el sustento de la familia, procurando que no falte nada en el hogar. Si tuviera otra vida, corregiría algunas cosas para darles más tiempo y estar con ellas, me arrepiento de no haber podido dedicarles el tiempo requerido en su niñez''.
Pese a ello, 'Cacho' afirma haber tenido y tener aún el gran cariño de sus alumnos, a quienes califica como sus hijos adoptivos, al tener con ellos una relación de años, ya que ha estado con ellos por años, enseñándoles las técnicas del atletismo y del triatlón.
Gran parte del día lo dedica a entrenar a niños jóvenes y adultos, desde nivel básico hasta el alto rendimiento, habiendo logrado hasta ahora conquistas significativas y contando entre sus discípulos más avanzados a: Daniel Aguirre (campeón panamericano y nacional), Claudia Margarita Lozano, Felipe Orona, Antonio García Olvera, Claudia Arguijo y Manuel Simental, algunos de ellos fuertes promesas dentro del deporte.
COMPROMETIDO
Al hablar del compromiso que tiene con sus 'hijos adoptivos', el entrenador afirmó que él mismo es cada día mayor, ya que los nuevos tiempos demandan cada día una mejor preparación de su parte, de ahí que en forma continua tome parte en cursos y seminarios, alimentando así el nivel de conocimientos que luego aproveche a favor de sus muchachos
"Soy ingeniero agrónomo fitotecnista, pero mi verdadera pasión y vocación está en el área deportiva; me gusta lo que hago y busco hacerlo siempre mejor. Muchos alumnos han pasado por mi escuela y creo que he entregado buenas cuentas, por ello los resultados que algunos de los muchachos me han regalado en diferentes competencias. Su triunfo y agradecimiento son mi mejor pago''.
Como hijo, recuerda con cariño y respeto a su padre, don Francisco Hernández (q.e.p.d.), cuando salía a pasear, aunque afirma vivió poco tiempo con él, ya que en realidad fue criado por su tía María Luisa, quien la hizo de padre y madre para él.
SER PAPÁ, EL MEJOR REGALO
Al hablar del significado de ser papá, dijo es justamente ese el mejor regalo que la vida pudo darle, lo cual agradece a Dios por tener la oportunidad de experimentar esta satisfacción.
Afirmó que más que un gran regalo material en este día u otro considerado especial, valora los detalles que sus hijas puedan tener con él, como es un beso, un abrazo, una palabra de cariño, una carta o algo que les salga del alma.
