Una real Copa mundial
La Copa del Mundo de Brasil se acerca ya a sus juegos finales. No hay duda de la atención que miles de millones de personas en el mundo están prestando a los partidos. México, por supuesto, no ha sido la excepción.
No tenemos todavía datos definitivos sobre el público que ha visto los juegos en estas primeras semanas, pero todo parece indicar que ha habido un incremento sobre las cifras de 2010. En Sudáfrica se logró un alcance en las transmisiones de televisión de 2,200 millones de personas que vieron cuando menos 20 minutos consecutivos de algún partido. La final entre España y los Países Bajos (Holanda) fue vista por 619.7 millones de personas durante un lapso de cuando menos 20 minutos.
En México hemos visto cómo las calles se han vaciado los días que ha jugado la selección nacional. La gente se congrega para ver los partidos como una experiencia colectiva. La final puede ser uno de los programas de televisión más vistos en la historia. Se espera un público superior al de la final de Sudáfrica.
El futbol es el más internacional de todos los deportes. El Super Bowl alcanza los mayores niveles de público en Estados Unidos, que sigue siendo el mayor mercado de televisión del mundo en términos de valor, pero la Copa del Mundo de futbol tiene una proyección internacional muchas veces superior. En países como México, España, Brasil o Argentina entre el 80 y el 90 por ciento de la población sintoniza los juegos de su selección nacional. Incluso en países de Asia, donde no hay la tradición futbolística que tenemos en México, se están obteniendo públicos cada vez mayores. China tuvo el mayor número de televidentes totales en cualquier país durante la Copa del Mundo de Sudáfrica con 329 millones, según la FIFA, alrededor de un 25 por ciento de la población del país.
Es verdad que el interés en el Mundial empieza a disminuir cuando los países son eliminados de la competencia. El que un equipo nacional se mantenga en la contienda es el mayor incentivo para que la gente de su país vea los partidos. Pero la final mantiene la atención del público independientemente de los equipos que jueguen. Por eso es consistentemente uno de los programas de televisión más vistos en el mundo.
Una de las razones del atractivo del futbol es la facilidad de comprender lo que sucede en la cancha. Un juego de futbol americano, uno de beisbol o uno de rugby difícilmente pueden ser entendidos por una persona que se siente a verlos por primera vez. Los neófitos necesitan a alguien que les explique lo que está ocurriendo y aun así se tardan varios partidos en entender cabalmente el juego.
La comprensión de un juego de futbol es mucho más fácil. Hay que perseguir la pelota y meterla con los pies o la cabeza en la portería contraria. Sólo el portero puede meter las manos. Siempre están ahí los misterios de reglas como la del fuera de lugar, pero en términos generales cualquier puede entender lo que ocurre en el primer partido que ve en su vida.
El futbol se ha convertido en una pasión mundial. En este sentido la Copa del Mundo es una competencia con un nombre acertado, mientras que la Serie Mundial de béisbol sigue siendo un encuentro deportivo en el que participan fundamentalmente habitantes de un solo país.
Twitter: @SergioSarmiento