Hoy se celebra el 42 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y México.
El mismo día de hace 42 años, con una visión estratégica de futuro y una excepcional sabiduría política, los líderes de nuestros dos países anunciaron la decisión de establecer relaciones diplomáticas entre ambos países, decisión que permitió a las dos grandes naciones ubicadas en ambas riberas del Océano Pacífico estrecharse fuertemente la mano, abriendo una nueva era de los intercambios entre los dos países. Con el paso del tiempo, la relación sino-mexicana, al igual que el tequila añejo, emana un aroma muy peculiar.
Durante los 42 años, China y México se han convertido en íntimos países hermanos. Los líderes de ambos países siempre han manejado la relación binacional desde una altura estratégica y han tomado en todo momento la amistad como el hilo conductor de los lazos bilaterales. Ambos países han establecido importantes mecanismos de diálogo y cooperación que incluyen la Asociación Estratégica, la Asociación Estratégica Integral, la Comisión Binacional Permanente, el Diálogo Estratégico y el Foro Parlamentario. Gracias a la eficiente conducción política de ambas partes, se han firmado más de 70 convenios de cooperación en distintos ámbitos entre China y México, lo que ha enriquecido mucho sus relaciones.
A lo largo de 42 años, China y México se han convertido en importantes socios de cooperación el uno para el otro. En 1972, año en que los dos países oficializaron sus relaciones diplomáticas, el valor del comercio bilateral fue inferior a los 13 millones de dólares, mientras que en 2013 esta cifra ascendió a los 39 mil 200 millones, es decir, 3 mil veces mayor que la registrada en 1972.
Asimismo, las inversiones mutuas, que eran nulas, han crecido notoriamente. Hasta el cierre de 2013, cerca de 60 empresas chinas han invertido más de 400 millones de dólares en México.
Mientras tanto, las inversiones mexicanas en el país asiático también van en aumento constante. Ciertos productos mexicanos, tales como la cerveza Corona, el pan Bimbo, las tortillas de maíz Maseca y equipos electrónicos y de comunicación, son cada día más conocidos y acogidos por los consumidores chinos.
En el mismo período, los intercambios culturales entre los dos países son cada vez más intensos. Tanto China como México son civilizaciones antiguas. La larga historia y la espléndida cultura de cada una de las dos naciones gozan de gran prestigio en la otra parte. Desde el establecimiento de lazos oficiales, nuestros dos pueblos tienen el creciente interés por acercarse y conocerse mejor. China y México han formado de manera recíproca a varios cientos de estudiantes, quienes se han convertido en mensajeros de la amistad. Actualmente México cuenta con cinco Institutos Confucio, siendo el país latinoamericano con el mayor número de este tipo de instituciones. Cabe destacar que a partir de los años 70 del siglo pasado, varias películas y telenovelas mexicanas, entre ellas Corazón Salvaje, Yesenia y Bianca Vidal, han cautivado a la audiencia china. El desempeño del director técnico Bora Milutinovic, residente en México y de la entrenadora china de clavados Ma Jin y sus respectivas contribuciones a la causa deportiva de China y México han sido un tema muy hablado entre las poblaciones de ambos países.
En los 42 años, la confianza mutua estratégica entre China y México viene fortaleciéndose de forma continua. Nuestros dos países se han respetado mutuamente, se han tratado el uno al otro en igualdad de condiciones y han mantenido una estrecha comunicación y coordinación ofreciéndose mutuamente sincero y eficiente apoyo y colaboración. Desde la década de los 70 del siglo pasado, China y México han unido esfuerzos para defender los intereses de los países del tercer mundo. En la actualidad, ambas partes actúan de manera coordinada y colaboran en la ONU, el G20 y otros organismos o mecanismos internacionales para hacer frente a distintos retos globales, de ahí que los consensos y la confianza mutua entre ambos países hayan venido ampliándose y profundizándose.
Tras 42 años de desarrollo, las relaciones entre China y México se hallan ahora en un nuevo punto de partida. El año pasado, los presidentes Xi Jinping y Enrique Peña Nieto intercambiaron visitas y sus imágenes o fotografías fueron ampliamente difundidas por la prensa. Los dos mandatarios han mostrado el fuerte interés de ambos países por potenciar su cooperación. Los lazos bilaterales registraron un avance histórico al ser redefinidos como una Asociación Estratégica Integral. Como resultado, la cooperación binacional en terrenos como el político, el comercial y el cultural ha cosechado múltiples éxitos. Todo ello ha hecho que las relaciones sino-mexicanas hayan sido uno de los focos de atención mundial.
El 2013 fue un año que merece ser registrado en los anales de los intercambios entre China y México, mientras 2014 será un año lleno de expectativas. En momentos en que celebramos el 42 aniversario de relaciones diplomáticas, debemos unir nuestros esfuerzos para cumplir nuevas misiones que nos encomienda la historia.
Primero, debemos tomarle bien el pulso a nuestra época. Aunque China y México tienen historias, realidades nacionales y culturas diferentes, sus relaciones siempre mantienen un gran vigor debido a que la comprensión mutua y la confianza recíproca entre ambas partes vienen consolidándose y que los dos países siempre han llevado a cabo su cooperación mutuamente beneficiosa con el objetivo de lograr un desarrollo conjunto. Hoy día, tanto China como México toman el desarrollo de las relaciones bilaterales como una de las prioridades de su política exterior. Los líderes y diversos sectores sociales de ambos países han dedicado entusiasmo y esfuerzo a fomentar esas relaciones. Un dicho chino reza: El tiempo no se detiene por nosotros. Tenemos que trabajar aprovechando la actual coyuntura favorable para lograr mayores avances de las relaciones bilaterales como pidió el presidentechino Xi Jinping.
Segundo, debemos trabajar para ampliar sin cesar la cooperación práctica entre China y México. El presidente Peña Nieto afirmó en una ocasión: "Hay una gran veta para explotar entre México y China". Siendo importantes países emergentes, China y México cuentan con grandes potenciales de desarrollo. Sobre todo, ambos países se encuentran en una etapa crucial para profundizar sus respectivas reformas, lo que generará nuevas oportunidades de cooperación. Hemos de realizar grandes esfuerzos para explotar y aprovechar las ventajas de que los dos países se complementen entre sí tanto en la ubicación geográfica como en diversas industrias, a fin de que la cooperación práctica entre China y México sea un ejemplo a seguir por los demás países emergentes.
Tercero, debemos afianzar los sentimientos afectuosos entre nuestros dos pueblos. Debemos aprovechar bien el gran valor que suponen nuestras riquezas culturales para acrecentar los intercambios y la cooperación en sectores como el cultural, el educativo y el turístico, entre otros, a fin de reforzar la amistad entre los dos pueblos mediante los intercambios culturales y de personal y generar más beneficios tangibles para ambas partes. La celebración del 42 aniversario de relaciones diplomáticas entre China y México coincide con el año del caballo, según el calendario lunar chino. En la cultura china el caballo es el símbolo de los esfuerzos impetuosos y el espíritu emprendedor e innovador. Confío en que en el futuro las relaciones amistosas y la cooperación de beneficio mutuo entre China y México se desarrollarán aceleradamente como un caballo galopante para alcanzar nuevos horizontes.
* Embajador de China en México