Cadáver. El cuerpo fue trasladado al anfiteatro para la necropsia de ley.
Al echarse un clavado en la alberca de la quinta donde trabajaba, un velador falleció al golpearse en la nuca.
El viernes en la noche, personal del área de Homicidios de la Fiscalía General del Estado de Durango se presentó en la quinta ubicada sobre la avenida Otoño de la colonia Miguel de la Madrid para tomar conocimiento de la muerte de José Ángel Hernández Rivas, de 51 años.
Según se detalló por parte de las autoridades, el occiso presentaba un golpe en la nuca que ocasionó el fallecimiento.
En el lugar se encontraba el propietario de la quinta que declaró ante las autoridades que llegó a revisar la quinta y descubrió que el velador estaba en la alberca.
De inmediato, pidió ayuda para que lo rescataran; pero lamentablemente, José Ángel ya no tenía signos vitales.
El occiso tenía ya varios meses trabajando como velador en la quinta y nunca había tenido ningún accidente.
Sin embargo, en esta ocasión, José Ángel ya tenía más de un día de haber muerto.
Luego de dar fe del deceso, el representante social de la Fiscalía ordenó que el cuerpo fuera trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.
El dueño de la quinta informó a las autoridades que le avisaría a los familiares de José Ángel sobre el accidente que sufrió para que se presenten en la Vice Fiscalía de Lerdo para identificar el cadáver.
