Violencia. En la imagen se observa a un manifestante al momento de tirar una piedra.
Venezuela vivió un día más de protestas contra el presidente, Nicolás Maduro, y sumó el muerto 19 en tres semanas, en vísperas del primer aniversario de la muerte del líder bolivariano, Hugo Chávez, fecha que se recordará con un desfile al que asistirán los gobernantes de Bolivia y Nicaragua.
"A un año de la partida del Comandante Eterno invito a todo el pueblo a rendirle homenaje en Paz y con Amor" con el desfile "cívico militar", pidió Maduro a través de Twitter, donde cubrió de elogios a su antecesor, fallecido por un cáncer tras 14 años en el poder.
Los actos llegan tras seis días consecutivos de asueto, ya que Maduro decretó no laborable el jueves y viernes pasados sumándolos al fin de semana y al lunes y martes de esta semana que son festivos por Carnaval, en un intento, según sus detractores, por "torear" la efervescencia política en su contra.
Con ello, miles de venezolanos se desplazaron hacia las playas y otros lugares, aunque también miles optaron por quedarse en las ciudades y sumarse a las marchas o mantener además las calles con barricadas, contra una de las cuales murió ayer estrellado un motorista, según la ministra de Comunicación, Delcy Rodríguez.
En este ambiente llegarán a Caracas los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y Nicaragua, Daniel Ortega, estrechos aliados de Chávez y ahora de Maduro, quienes personalmente confirmaron que asistirán al desfile, sin que el Gobierno venezolano lo haya anunciado.
El alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, uno de los más acérrimos opositores venezolanos, se preguntó en Twitter "¿Cuantas hectáreas se podrían sembrar con lo que se van a llevar los Castro y demás chulos en sus maletas?".
"¿Cuantos medicamentos se podrían comprar con lo que están despilfarrando en el desfile de mañana?", se preguntó Ledezma.
El desfile se cumplirá en momentos en que en Caracas y varias ciudades de Venezuela están sumidas desde el 12 de febrero en una ola de protestas contra las políticas económicas y sociales del Gobierno de Maduro, la cual, antes del muerto reportado ayer por la ministra Rodríguez, ha dejado un balance oficial de 18 muertos.
El Gobierno responsabiliza a los opositores ahora de 16 de esas muertes y admite que en las 3 restantes están involucrados agentes de cuerpos de seguridad ya detenidos, mientras que desde la oposición se ha denunciado extralimitación del uso de la fuerza por parte de las autoridades y se ha señalado a "colectivos" chavistas como culpables. La defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez, señaló ayer que tienen 43 denuncias de abuso de la fuerza por parte de la Policía, pero no de torturas.
Chávez está por doquier
Una vez al mes y con mucho esfuerzo, Félida Mora viaja en transporte público desde la ciudad de Los Teques a Caracas, en un trayecto de 32 kilómetros, con el único objetivo de orar en la improvisada "Capilla Santo Hugo Chávez", construida en el populoso barrio 23 de enero. El expresidente Chávez "para mí fue algo grande; lo he llorado mucho, más que a mi familia", dice Mora con los ojos aguados de las lágrimas, una ama de casa de más de 60 años, tras orar en esta pequeña capilla de madera y techo de zinc edificada por los vecinos de los alrededores del cuartel de la montaña 4F, donde reposan los restos del expresidente. "Mi mamá, que Dios la tenga en la gloria, se murió y yo lloré los primeros días como todo, pero nunca como a él".
Mora, residente de la capital del estado Miranda y bastión de la oposición, dice que nunca recibió ningún beneficio directo de los programas sociales de Chávez y, sin embargo, le pide "a Dios y a la Virgen que me lo cuiden".