Benito Juárez García.
En la época de elevación de la categoría política de Villa a la hacienda de San Fernando, se vivió un acontecimiento de relevancia nacional en la llamada Intervención francesa, donde los ciudadanos lerdenses dan muestras de patriotismo y hospitalidad al recibir al Lic. BENITO JUÁREZ GARCÍA y sus ministros, los cuales se hospedan en diferentes casas del pueblo de la ya conocida Hacienda de San Fernando en los días 27, 28, 29 de Agosto de 1864.
En ese entonces de la estancia que hace el Benemérito en la Villa de Mapimì, el Sr. Catarino Navarro y don Canuto Gamboa, en representación de los habitantes de la Hacienda aprovechan para hacerle la petición de que sea elevada al rango de Villa a la hacienda de San Fernando. Ante la cordial petición que hiciera este Pueblo al Presidente Juárez, éste concede y resuelve elevarla a la Categoría de Villa con el nombre de Lerdo de Tejada en honor del desaparecido ciudadano liberal Lic. Miguel Lerdo de Tejada. Dando instrucciones de formular un decreto en Mapimí, Dgo., el 8 de Septiembre de 1864, convirtiendo en Villa a la hacienda de San Fernando de Avilés.
Teniendo don Catarino Navarro el decreto de referencia, junto con sus coterráneos procedieron a trazar el nuevo pueblo, al poniente del antiguo Rancho de San Fernando, tomando como punto central de la manzana de los Supremos Poderes, donde se encuentran actualmente nuestro bello edificio del Palacio Municipal, el Reloj Público con su Torre Morisca, y la grandiosa Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús. Para 1865, estos hombres emprendedores tenían trazado uno de los centros urbanos más importantes de la Comarca Lagunera, con sus manzanas, calles y bocacalles bien alineadas. Continúan con los espacios de esparcimiento denominados plazas, construyeron también la casa de Gobierno, y posteriormente la capilla del pueblo, las grandes casonas de las familias en sus distintas actividades económicas, los comercios y talleres de jarcerías, etc.
La Villa Lerdo de Tejada como Cabecera de la Municipalidad, logró un mejor desempeño en el desarrollo agrícola, ya que por su cercanía al río Nazas, provocó un gran dinamismo económico que atrajo a un gran número de capitalistas, mismos que en un término de 8 años convirtieran en la mejor área geográfica y estratégica de la región Lagunera, superando a la Villa de Mapimí
Ante estos hechos históricos gran número de historiadores oficiales, tanto a nivel nacional como laguneros, han expresado su desacuerdo en cuanto a que si el Benemérito de las Américas pisó tierra lerdense ò que el decreto de elevación a Villa existió en la fecha que se señala, que demuestre el acto jurídico. Por otro lado, don Amado Illarramendi Fierro afirma en sus crónicas que el decreto sí existió y se envió al Congreso del Estado de Durango, el cual se extravió, en virtud de que en ese entonces la Legislatura del Estado estaba en manos del partido Conservador y afrancesado.
Los lerdenses no dudan de los argumentos del Prof. Amado Illarramendi, los cuales a toda costa los defendió, porque él se dedicó al estudio y a la investigación por ser un irrestricto liberal, si no hay manera de comprobar su exacta verdad, los testigos de esa realidad dejaron constancia que hoy en actualidad observamos con nuestros propios ojos. Illarramendi no tendría por qué mentir, al hacer sus publicaciones del Decreto promulgado por Juárez el 8 de Septiembre de 1864 en la Villa de Mapimí, si lo dio a conocer fue porque tenía las pruebas suficientes para manifestarlo. Como muestra existió otro decreto firmado por el Gral. José María Patoni, con fecha 18 de septiembre del año 1864, donde se nombran las autoridades de la naciente Villa Lerdo de Tejada, encabezada por don Catarino Navarro Urías, como primer jefe político de la Villa.
Otro punto sería el celo político, pues en el Decreto del Gobernador Patonì del 18 de septiembre de 1864, que tampoco se ha encontrado, donde se le da el carácter de Villa a la Hacienda de San Fernando, que en su artículo tercero la reconoce como Cabecera del Partido de Mapimí, a la ya convertida Villa Lerdo de Tejada, en el cual manifiesta que la población de Mapimì perdería su hegemonía como Cabecera del mismo.
Analizando estos puntos, debemos de tomar en cuenta las causas de que el decreto respectivo no se le dio trámite rápido o no haya llegado a su destino, en virtud de que desde el día 14 de julio del año de 1864, la Capital del Estado de Durango estaba bajo las tropas francesas, las que ocuparon la mayor parte del territorio duranguense, y la caravana de la dignidad que encabezaba don Benito Juárez tuvo que huir hacia Chihuahua, para lo cual ya habían desconocido a Patonì, que era un general liberal y gobernador del Estado de Durango, a quien los políticos conservadores impusieron como Gobernador a Buenaventura G. Sarabia, quien terminó hasta febrero de 1865.
Existen otros testimonios para afirmar de la veracidad de que sí existió el documento de la elevación de la hacienda de San Fernando a Villa Lerdo de Tejada, y eso se da en el regreso de Paso del Norte, (Cd. Juárez) Chihuahua, el Presidente Juárez y hace su estancia en la Ciudad de Durango, Dgo., donde antes de proseguir a la Ciudad de México, el 14 de Enero de 1867, deja su constancia de nombramiento como nuevo gobernador del Estado de Durango, al Gral. Francisco Ortiz de Zárate, de acuerdo al decreto del día 10 de Enero de 1867 el cual fue firmado por el Lic. Sebastián Lerdo de Tejada, tomando posesión Ortiz de Zarate como Gobernador el día 12 de enero de 1867.
De acuerdo con lo anterior podemos deducir, que al Gobernador Francisco Ortiz de Zárate le fue encomendado por el Lic. Benito Juárez García, antes de hacer su viaje a la Capital de la República, para que fuera regularizada la situación jurídica de la elevación de la hacienda de San Fernando al rango de Villa que se había hecho por decreto en el año de 1864 y que por los hechos de armas que sucedieron después de esa fecha, ese documento no se publicó oficialmente, por lo tanto no llegó a aplicarse legalmente, ya que la ciudad de Durango fue posesionada por las fuerzas francesas y tomando el control político del Estado duranguense por los miembros del Partido Conservador.
Es por esta razón que se estima darle autenticidad jurídica al nombre del Lic. Miguel Lerdo de Tejada, que había muerto el 22 de marzo de 1861. Ratificando con el decreto del 24 de Junio de 1867, el reconociendo oficial a la Villa Lerdo de Tejada, además como municipalidad y cabecera de la misma, de acuerdo con el decreto que fue publicado en el Periódico Oficial del Gobierno del Estado de Durango el 4 de Julio de 1867 y firmado por el Gobernador Ortiz de Zárate, pero sin darle la asignación como cabecera del Partido del Mapimì, como originalmente lo había decretado Patonì.
Con lo anterior viene a dar explicación a historiadores, de que efectivamente el primer decreto firmado por el Lic. Benito Juárez García en su estancia en la Villa de Mapimí, el 8 de septiembre de 1864, se extravió y no llegó a manos del Gobierno del Estado para que fuera publicado, y así darle el nombre de la Categoría de Villa a la hacienda de San Fernando. Lo que demuestra que de no existir estos antecedentes, le hubieran asignado a la Villa otro nombre y sería ilógico que no fuera el de don Miguel Lerdo de Tejada.