La magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), María del Carmen Alanís, dijo que la violencia política es una cara más de la violencia de género y llamó a no permitir que esas prácticas menoscaben el ejercicio de los derechos y prerrogativas de las mujeres a acceder a cargos de elección.
"Debemos tener claro esto, porque no se puede jugar con los riesgos que implica algo tan importante para la vida de las mujeres", dijo.
Entre las conductas de violencia política contra las mujeres mencionó la violencia y discriminación de féminas que son amenazadas dentro de sus partidos para evitar que se registren como candidatas.
Mujeres a las que sus partidos les exigen que firmen renuncias en blanco, antes de registrarlas como candidatas y otras que han sido ofendidas durante sus campañas políticas.
Al participar en el Foro Paridad de Género y Procesos Electorales, organizado por el Instituto Nacional Electoral, la magistrada Alanís incluyó en la violencia política cuando no se les otorgan los recursos financieros de parte de sus partidos políticos para realizar campañas.
Para hacer frente a la violencia propuso la información la conciencia social y la modificación de conductas a través de políticas públicas y legislación de entidades y Federación.