Voz del Dihablo

Estimados 'metalheads' del mundo y la Comarca, la semana pasada comentamos a 'grosso modo' lo sucedido en el festival más importante de metal en México. El espacio se agotó pronto y tuve que limitar mi comentario. Y aunque como diría el Príncipe: "ya lo pasado, pasado", quiero terminarlo brevemente con algunas impresiones finales.

El H&H 2014 (ya no diré completo el nombre como primer síntoma de haberlo superado) sobrepasó expectativas y deja muchos pendientes. Queda claro. Pero volviendo a una de las primeras polémicas del cartel, puedo decir que entiendo el porqué poner a Korn y Limp Bizkit como parte de los 'headliners'. Fui de los que renegué y estuvo a disgusto con la inclusión de estas dos bandas, sobre todo en horarios y escenarios estelares. Soy de los que comparte el punto de vista que ambos le quitan fuerza al concepto del festival. Soy de los que no pensé ir a verlos.

Pero una vez ahí, en la Curva 4 del autódromo, la respuesta al "porqué" saltaba a la vista. Sus escenarios estuvieron a tope (pese a los incontables comentarios negativos sobre estos grupos "que no son de metal"). Quizá no todos los presentes lo disfrutaron de la misma forma, pero ahí estaban. Entre la masa, un servidor. En Korn, abajito del escenario en las primeras canciones. En Limp Bizkit, alejándome a paso veloz; escapando a un destino más digno.

Sí, presencié canciones de ambos desde ángulos contrastantes. Sólo para corroborar que aún y con el paso de los años, no me gusta ninguna de las dos bandas. A Korn le reconozco su poder sobre el escenario y que el bajo suena potente. Jonathan Davis sabe hacer su chamba y todos cuidan los detalles de su presentación, pero no es para mí. De Fred Durst y compañía no tengo algo bueno qué decir, salvo que saben cómo atraer la atención de sus fans.

Rob Zombie fue distinto. No fui por él pero disfruté bastante el tiempo que vi de su "show"; el tipo está loco. Y luego Kiss, la legendaria banda que ha sobrevivido cuatro décadas. Tampoco soy fan, pero sí quería ver qué traían. Y pues no quedé impresionado. El 'setlist' fue muy bueno. Abrieron con Creatures of the Nights (de las que me gustan), rola que no tocaban desde 2004 y siguieron con muchos de sus éxitos, pero no fue lo que esperaba. La voz de Paul Stanley deja que desear. El mentado 'spider stage' no hizo gran cosa. Y la mitad de sus canciones, quitándole la pirotecnia, son sosas. Además, las fallas del sonido presentes.

En general, la gente lo disfrutó. Aunque después de ver a grupos más potentes, Kiss no fue el gran cerrador.

Carnales, la vida sigue después del infierno. En el penúltimo mes del año, habrá en La Laguna algunos eventos interesantes para que los consideren en su agenda. Este domingo estará de regreso While The Heart Becomes en Torreón, banda de metalcore de Durango.

The Castaway Tour 2014 toca ciudades como Saltillo (mañana), Monclova, Distrito Federal, Chihuahua, Zacatecas (entre otras) y termina en su natal, el 20 de diciembre. Luego de una gira por Centroamérica en meses pasados, su página de Facebook registra casi 17 mil "likes".

WTHB pone a Torreón como una de sus "ciudades favoritas", donde se hará acompañar de Joliette, una de sus bandas favoritas. Y por fin, para los románticos, traerán su primera producción, The Sinking, en físico (con tres temas extras).

Un día antes (sábado), en el famoso lugar sobre la Hidalgo, entre 11 y 12, habrá un tributo a Helloween, con grupos como Raptor, Levanon, Conjhura y Almas Olvidadas. Una semana después, el 15 de noviembre, ahí mismo estará de visita Spit On Your Grave, una poderosa agrupación regiomontana de 'death metal' liderada por mujeres que compartirán el foro con Fénix Penuria y Tales of Knights. Tomen nota. Una extra: Hoy, para los rebeldes y relajados, Armando Palomas visitará el ancestral Tahoneros.

Por cierto, los amigos de Calling Home ya editaron su primer EP, Silencio a Voces, chéquenlo.

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