Voz del Dihablo
Pues nada. Estaba sentado esperando que dijeran dónde iba a ser el Hell & Heaven este año. Y así me quedé.
Parece que el infierno se les adelantó a los organizadores de este magno evento. Apenas la semana pasada aseguré en este espacio que estábamos a unos días de presenciar dos largas jornadas de rock y 'metal' en nuestro país. De cabelleras largas y 'riffs' contundentes. De locura arriba y abajo del escenario. De un desbordamiento de energía, ésa que sólo puede emanar de la música que tanto nos apasiona.
Pero nada. Unas horas después de escribir esas líneas, comenzaron los rumores sobre la cancelación del Hell & Heaven. Ya muchas cosas se han dicho desde entonces. Los organizadores salieron a decir que no había de qué preocuparse y el mega concierto se llevaría a cabo en las fechas que estaba planeado. ¿Dónde? ¡Quién sabe!
Juan Carlos Guerrero, parte del comité organizador, todavía confirmó el martes anterior que el H&H "estaba más fuerte que nunca".
Aquí el problema es para los simples mortales. Quienes tuvieron que pedir permiso en el trabajo para faltar. Quienes viajarían horas por tierra y aire. Quienes han gastado su dinero. Quienes tendrían que planear su propia logística (transporte, hospedaje, viáticos, demás).
Los organizadores tampoco la han de estar pasando bien. El Gobierno del Estado de México de verdad les puso el pie en el preciso momento de dejarlos al borde del abismo. A menos de dos semanas de realizar un evento que se planeó por lo menos con 9 meses de anticipación, ¿qué oportunidad tenían de salir airosos de esto? Podría decirse que "murieron" en el intento. No quisiera estar en sus zapatos.
Algunas bandas importantes que estarían en el evento los respaldaron hasta donde pudieron. Mientras Carpathian Forest se bajó del barco antes lamentando la situación de los gobernantes en México. Combichrist se les unió un día después (ayer) con el siguiente mensaje: "el show se cancela. No iremos a México, ni lo harán ninguna de las otras bandas hasta donde sabemos".
Ayer, la mala noticia llegó. Según informaciones que llegan del más allá, a Puebla llegaron tráileres con equipo para instalar, pero les negaron el acceso. Juan Carlos Guerrero aseguró que las pérdidas por la cancelación del festival ascenderían a 150 millones de pesos y se verían afectadas 500 familias. Los 'tours' que viajarían del interior de la república también verán pérdidas. El reembolso para quienes pagaron boleto comenzará en unos 15 días. ¿Y los que vendrían de Costa Rica, Colombia, Estados Unidos...?
El Hell & Heaven pudo cancelarse desde que Eruviel Ávila decidió que no se hiciera en Texcoco. Pero sus creadores quisieron mostrar fuerza y unión. No debe ser fácil mover cuatro escenarios para 70 bandas y buscar un lugar donde meter a 80 mil almas libres.
Este es el país en que vivimos. Que las Fuerzas de la Oscuridad perdonen a esas mentes chiquitas y corruptas que nos privaron hoy de vivir una auténtica fiesta metalera.
Sígueme y hablemos ‘heavy’: @Foko_54