Entre bromas. La actriz y el exmandatario se divirtieron a lo grande con la visita de la lagunera al Centro Fox, donde 'Carmelita' no perdió la oportunidad de realizarle diversas preguntas.
La actriz Carmen Salinas quedó estupefacta al visitar el Centro Fox y que su anfitrión fuera el exmandatario Vicente Fox Quesada, a quien no dudó en señalarle "llego, como y me voy, como le dijo usted a Fidel Castro", con lo que provocó la risa del guanajuatense.
En compañía del director y productor de la película Kilo por gramo, Carlos Cavalo, y del actor Horacio Castelo, se reunieron en el restaurante del expresidente, quien llegó junto con su hija mayor, Cristina Fox, y entre chascarrillos, Carmen cuestionó a Fox de por qué quería aprobar la legalización de la marihuana.
"¿Ya se aventó usted un churro?", preguntó Carmen y le comentó. "Si aprueban la legalización de la marihuana seguro le harán un monumento". Al cuestionarle si ya tenía sembrada su "matita" en el rancho, Fox respondió: "Cómo crees, aquí sólo se siembran verduras, como col, brócoli, toda clase de verduras y doy trabajo a dos mil empleados".
Carmen quedó admirada de la tecnología que ha invertido Fox para transformar el rancho en un centro cultural y espectacular.
Además de ver que el expresidente se llevó el escritorio original, el famoso teléfono rojo para el lugar que cada vez adquiere mayor relevancia.
Carmen no se quedó con las ganas de sentarse en la silla que usó Fox en la Residencia Oficial de Los Pinos y sentirse presidenta por un momento. "Se trajo Los Pinos para acá verdad", a lo que le respondió el exmandatario que realizó una réplica incluyendo el ventanal, donde solía ver los jardines y el Castillo de Chapultepec.
Entre el juego de palabras, Vicente Fox no se quedó con la duda de saber si Carmen es familiar del expresidente Carlos Salinas de Gortari, por el apellido Salinas Lozano y ella respondió: "No, aunque soy Salinas Lozano, pero sin presumir De Gortari".
Vestida de azul para la ocasión, Carmen le cuestionó qué tipo de cine le gustaba al político y éste reveló que no es su fuerte, ni cine ni la televisión porque son como somníferos cuando se atreve ver alguna película.
El expolítico confió a Carmen lo que pretende realizar en su rancho donde se hacen concursos de ajedrez y ella le preguntó que si lo jugaba y el exmandatario respondió. "No, si no supe mover al país".
Fox aguantó todas las preguntas que Carmen le hizo y le señaló que lo escuchó cantar en alguna ocasión y le pidió entonara "El hijo desobediente", su canción preferida.
Al realizar un recorrido por el rancho, Carmen apreció un centro de cómputo así como las réplicas de los salones que disfrutó el exmandatario en Los Pinos. Las sillas de montar que le obsequiaron de varias partes del mundo. Las salas oval, donde los niños que se benefician del Centro Fox aprenden a debatir a nivel nacional e internacional.
Fox también comentó que en su niñez, en el rancho San Cristóbal jugaba con una resortera para cazar animales, momento que aprovechó Carmen para saber si como Lucero, quien fue severamente cuestionada por practicar la caza de animales, habría tenido esa experiencia. "Usted lo hizo con resortera".
Al pasar por una sala donde se encuentran los líderes mundiales que han dejado huella, como Nelson Mandela, el Dalai Lama, la Madre Teresa de Calcuta, entre otras, Fox le dijo que ella merecería estar ahí, porque además de ser una gran actriz, sabe que realiza diversas labores altruistas y sobre todo porque es una gran líder de opinión y muy popular: "Tienes que hacer una frase para colocarla aquí".
Al finalizar el recorrido Vicente Fox agradeció a Carmen su visita y disculpó a su esposa Martha Sahagún de no estar presente por un compromiso familiar.
Ante el cuestionamiento de los medios de qué sentía de recibir a una priísta de hueso colorado, Fox dijo: "Qué priísta va ser ni qué nada".