Manuel Vázquez Montalbán, quien fuera el creador del famoso detective de ficción Pepe Carvalho, nació el 27 de julio de 1939, aunque hay biografías que señalan el 14 del mismo mes y año, en Barcelona, donde obtuvo su título universitario en Filosofía y Literatura.
A mediados de la década de los 60, incursionó en la poesía, género que combinó con ensayos y artículos de prensa que denotaban una inclinación hacia la política y la crítica social.
En 1962, después de participar en una manifestación en apoyo a los mineros en Galicia, España, fue encarcelado y torturado durante cuatro años por un tribunal militar.
Según el portal “biografiasyvidas.com”, tras obtener el Premio Planeta por su publicación “Los mares del sur”, en 1979, comenzó a dedicarle más tiempo a la literatura.
En la década de los 80, el escritor comenzó a trabajar como columnista en el diario “El País”, lugar que le permitió desarrollar sus dotes como maestro en todos los géneros periodísticos, los cuales había practicado desde su adolescencia.
Famoso por incursionar en géneros como la novela negra, Montalbán comenzó a realizar textos más arriesgados y ambiciosos.
Según sus biógrafos, con la obra “El pianista” (1985), se vislumbró una nueva línea del novelista, en la que se leen algunos de los pasajes más conmovedores de la Barcelona de los vencidos.
Entre las numerosas obras de Montalbán se encuentran títulos como “Roldán, ni vivo ni muerto”; “El estrangulador”; “Panfleto desde el planeta de los simios” y “Pasionaria y los siete enanitos”.
Con la novela “Erec y Enide” (2002), el escritor marcó un cambio radical en su concepción del género; su obra que había sido reconocida por incluir el devenir de los personajes en un ambiente histórico y social, se transformó en un relato con tintes de belleza nostálgica, menciona por su parte el portal “biografías y vidas”.
Merecedor de una gran cantidad de galardones como el Premio Nacional de Narrativa, el Nacional de las Letras, el de la Crítica de la Antigua República Federal de Alemania y el Recalmare de Italia, Montalbán se convirtió en un autor de culto para los lectores de novela negra, principalmente en Francia e Italia.
Su legado está conformado por una serie de conferencias sobre la novela policiaca española, la relación entre historia y literatura o el papel de la literatura y los escritores en la construcción de la ciudad democrática, en Nueva Zelanda y Australia, mencionan sus biógrafos.
Manuel Vázquez Montalbán murió el 18 de octubre de 2003 a consecuencia de un infarto masivo en el aeropuerto de Bangkok, Tailandia.