Legado. María Kodama recuerda la máxima de Borges.
La viuda del escritor Jorge Luis Borges, María Kodama, de visita en El Cairo, señala en una entrevista que al célebre autor argentino "no le importaban los premios, lo que le importaba era escribir".
Sosegada, discreta y con un delicado timbre de voz, la defensora y difusora del legado de Borges rememora la principal anécdota del que fue su marido con el premio que nunca ganó: el Nobel de Literatura.
"A él le iban a dar el doctorado honoris causa en la Universidad Católica de Chile, y en ese momento estaba (Augusto) Pinochet gobernando. Entonces, le llamaron por teléfono desde Suecia (sede de los premios Nobel)", recuerda Kodama.
En esa conversación, "él contestó (a su interlocutor): 'Le agradezco mucho lo que me dice, pero hay dos cosas que un hombre no puede tolerar: sobornar y dejarse sobornar'".
Según Kodama, esa llamada se produjo para aconsejar a Borges que, si quería ganar el Nobel, no fuera a Chile, ya que en la ceremonia de entrega iba a estar presente el dictador. El escritor argentino rechazó la recomendación.
Para la compañera de Borges, cuando a una persona le dan un reconocimiento de ese nivel, "es protocolo que esté presente el presidente. No es que fuera a verle, fue a recibir la condecoración".