Derrota. La militancia panista en Matamoros ya pronosticaba una desastrosa derrota en la elección federal: Alberto Ramírez. (MARY VÁZQUEZ)
Para el exdirigente del Partido Acción Nacional (PAN) en Matamoros, Alberto Ramírez Suárez, los malos resultados en la elección eran un desastre anunciado porque su partido está tomado por el grupo de Guillermo Anaya Llamas y ha propiciado un divisionismo entre la militancia.
Y es que ni siquiera la carta fuerte del PAN, Jorge Zermeño, ganó: "Él era un excelente candidato, pero un candidato sin partido, un candidato sin comité, aunque ellos quieran demostrar lo contrario. Aquí los únicos que ganan son Guillermo Anaya y Bernardo González (dirigente del comité estatal), porque las dos diputaciones plurinominales que van a entrar son César Flores de Monclova y Karla Ozuna de Nava, hija del compadre de Anaya".
Hablando concretamente de Matamoros, dijo que han sido los peores resultados de los que se tienen historia, al registrar una votación de poco menos de 5 mil electores, cuando en la pasada elección a diputados federales se obtuvieron casi 30 mil votos.
Ramírez Suárez expuso que el presidente del Comité Directivo Estatal, Bernardo González, por indicaciones del diputado federal Guillermo Anaya, desactivó el comité municipal para convertirla en una delegación y nombró a cargo a Juan Antonio Woong Lezama, al ser opositores de ese grupo, por lo que la militancia de este municipio decidió no realizar activismo en favor de la candidata Blanca Eppen, quien perdió por una avasallante diferencia.
Cuestionó además las negociaciones con el Partido Primero Coahuila (PPC), que ni aliándose con ellos "levantó" un poco la elección.
Pidió la renuncia de la dirigencia estatal ante los malos resultados que se han tenido, pues en la pasada elección para la renovación del Congreso Local, se perdieron todos los distritos y en esta ocasión pasó lo mismo, se perdieron los siete distritos federales que se tienen en el estado.
Dijo que en esta elección, en todo el distrito, la candidata Blanca Eppen logró sólo 25 mil votos, mientras que su adversaria, Flor Esthela Rentería obtuvo casi 50 mil votos; es decir, perdieron tres a uno.
