Mientras corría por tercera ocasión como un loco, de espaldas, ante un batazo descomunal que lo tapaba por completo, Edwin Donald recordaba perfectamente las recomendaciones vehementes que le hizo a su lanzador, Don. "Tírale abajito y si puedes dale un bolazo en su pierna derecha, está tan lastimado que no se levanta". Qué va. Ese rubio de Oklahoma le zumba a la pelota como si fuera práctica, así que mientras el bello inmueble San Pedro la gente se levanta de sus butacas a cada salvaje toque de ese chico, un tal Mickey Charles, nuestro jardinero maldice al mundo corriendo al fondo del parque.
En la caseta, Don y Edwin casi se van a los golpes, hasta que son separados. "Dale un pelotazo," insiste.
Con el marcador 4-3 para los Dodgers de E.D. llega un nuevo turno para el rubio, que antes recibió un golpazo y ganó la primera base pero se sigue doliendo del impacto, así que no tiene mucha confianza. Deja pasar el primer lanzamiento, al segundo le da de foul. El tercero y cuarto, son tiros abiertos, no le conceden nada. Al quinto mete una terrible línea entre dos, otra vez a correr Edwin como un loco, la pelota se va hasta el fondo, golpea la madera, se esconde como gallina perseguida y cuando la tiene consigo, mira que el rubio decidió, lo que era un limpio triple, hacerlo jonrón de campo y se lanza hasta jom. E.D. es como un viejo cazador en las películas de Tarzán, su tiro maravilloso va directo a donde el cátcher saca al corredor con cierta ventaja pues venía disminuido por el golpazo, que después de todo, decidió el partido en campo de los muertos-vivos, los que están plenos y juegan beisbol puro en el más allá, con permiso del presidente del consejo, que es un fan más.
Sí, el pitcher golpeador es Don Drysdale y los otros, pues. Edwin Donald "Duke" Snider (1926-2011). Formidable center field de los Dodgers. Le apodaban "Zorro plateado". Ganó dos series mundiales. Acudió a 8 juegos de estrellas. Bateó 407 jomrones e impulsó 1333 carreras. En el Salón de la Fama desde 1980.
Mickey Charles Mantle (1931-1995) Uno de los jugadores más brillantes que haya producido el beisbol. Jugó 12 series mundiales de las que ganó 7, siempre con Yankees. Fue a 20 juegos de estrellas. Bateó 536 cuadrangulares e impulsó 1509 carreras en 2400 partidos. Llegó al Salón de la Fama en 1974. En 1956 ganó la triple corona con .353 de porcentaje, 52 jomrones y 130 producidas.
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