Fiesta. Se lleva a cabo en estos días la Feria de Bermejillo 2015, con motivo del aniversario de la comunidad.
Existe una serie se inconformidades ante la celebración de la Feria de Bermejillo, comunidad del municipio de Mapimí, Durango, por la venta excesiva y sin control de bebidas intrigantes, lo que ocasiona un incremento en los disturbios y alteraciones al orden público.
Ante esto, el regidor de extracción panista en el Ayuntamiento del Pueblo Mágico, Carlos Carrillo García, denunció al comité organizador de esta feria, así como al presidente de la Junta de Gobierno Martín Macías Sánchez, quienes permitieron la instalación de los puestos de venta de bebidas alcohólicas a un costado de la plaza principal y las oficinas de gobierno local. "La Feria de Bermejillo debe ser una gran verbena de convivencia familiar, sin embargo, lamentablemente se convierte en un problema con pleitos y riñas por la excesiva venta de bebidas alcohólicas, lo que da un mal ejemplo para los niños y no favorece las buenas costumbres".
Se desata violencia
Agregó que durante este evento, el alcohol se vende sin ningún control, por lo que jóvenes y adultos lo consumen sin medida, ocasionando no sólo una mala imagen para las familias, sino situaciones de violencia.
"En años anteriores, a los puestos de bebidas alcohólicas se les otorgaba un permiso para instalarse a unas dos cuadras de la plaza principal, es decir, alrededor de 200 metros del lugar y de las oficinas de la Junta de Gobierno de la comunidad", dijo Carrillo García.
Sin embargo, agregó que este año, tanto el comité organizador, como el propio presidente de la junta, permitieron que se instalaran prácticamente en la plaza principal, donde a decir del regidor, se realiza la venta de este tipo de bebidas en una forma desmedida e inapropiada, sin por respeto a las familias que acuden a la feria.
Riñas
La denuncia se genera porque esta fiesta ha sido por años una convivencia sana y el pasado sábado hubo una riña campal y otras peleas más el resto de los días de feria.
