Nuevo plan. El presidente de Estados Unidos reconoce que es fundamental presentar una estrategia antiterrorista.
La amenaza del terrorismo se cierne sobre la temporada de fin de año en Estados Unidos, de modo que el presidente Barack Obama planea una serie de actos esta semana para tratar de tranquilizar al público sobre su estrategia que busca contener al grupo extremista Estado Islámico en el exterior y a sus simpatizantes en la nación.
Las visitas de Obama al Pentágono y al Centro Nacional de Contraterrorismo forman parte de una iniciativa para explicar su estrategia antiterrorista, dijeron funcionarios de la Casa Blanca, después de un discurso ayer domingo que, según los críticos, no bastó para aquietar los temores de la población.
Otro objetivo consiste en establecer un contraste con el aspirante a la candidatura presidencial republicana Donald Trump y sus afirmaciones controversiales sobre los musulmanes. El gobierno de Obama ha advertido que la retórica de Trump envalentona a los extremistas que buscan lanzar a Estados Unidos a una guerra con el islam.
"Los terroristas como el Estado Islámico tratan de dividirnos según nuestra religión o procedencia", afirmó el presidente el sábado en su mensaje semanal por radio e Internet. "Es así como provocan temor. Es así como reclutan". Agregó que en la semana próxima "nos movilizaremos en todos los frentes".
La campaña de relaciones públicas, una semana antes de Navidad, tiene lugar en momentos de inquietud tras el ataque masivo en San Bernardino, California, este mes, y los ataques en París hace unas semanas.