Muerte. Estima Naciones Unidas que la muerte del piloto muy probablemente será considerado crimen de guerra.
El brutal asesinato de un piloto jordano por parte del grupo terrorista Estado Islámico "muy probablemente constituye un crimen de guerra", dijeron ayer viernes expertos de la ONU.
Adama Dieng, asesor especial del secretario general de la ONU para la prevención del genocidio, y Jennifer Welsh, asesora especial del secretario general sobre la responsabilidad de proteger a civiles en un conflicto, emitieron un comunicado conjunto que dice que el asesinato del teniente Muath al-Kaseasbeh es otro ejemplo de los "actos inhumanos" del grupo extremista y de su "deliberado abuso de los derechos humanos y de la ley humanitaria internacional".
Agregaron que los miembros del grupo Estado Islámico "necesitan saber que se le hará rendir cuentas por sus crímenes".
Al-Kaseasbeh fue capturado en diciembre después que su avión F-16 se estrelló en territorio controlado por el Estado Islámico en el norte de Siria. Hace unos días, los militantes difundieron un video en el que lo muestran cuando es quemado vivo dentro de una jaula.
REHÉN HABRÍA MUERTO EN BOMBARDEO
Un supuesto mensaje del grupo Estado Islámico difundido ayer viernes asegura que una rehén estadounidense murió por un ataque aéreo jordano a las afueras de Raqqa, Siria, el principal bastión del grupo extremista.
El comunicado identifica a la mujer como Kayla Jean Mueller y detalla que murió durante las oraciones musulmanas -ayer viernes alrededor del mediodía_, en bombarderos que tuvieron como objetivo "el mismo lugar durante más de una hora".
Los ataques no mataron a milicianos del Estado Islámico, según el comunicado.
El mensaje incluye fotos que dicen mostrar el lugar del bombardeo, con un edificio de tres pisos muy dañado, pero no había imágenes de la mujer.