Las irregularidades cometidas por los partidos políticos para obtener votos marcaron la elección local de Chiapas.
El acarreo de votantes, la coacción del voto, el robo de urnas y la desaparición de casillas, así como la negativa al sufragio y a la instalación de casillas fueron las anomalías que predominaron.
Dichas prácticas ilegales, fueron principalmente en favor del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y sus candidatos, según denunciaron partidos de oposición.
En Tuxtla Gutiérrez, una funcionaria del Gobierno estatal fue retenida por alentar la compra del voto. Los propios ciudadanos llevaron a la delegación de la PGR a Verónica Rodríguez Montes, titular del Instituto de Estudios de Posgrados.
Los ciudadanos la detuvieron en flagrancia con padrones de programas sociales con los que estaba alentando la compra del voto.
En municipios como Tuxtla Gutiérrez, Suchiate, Mazatán, Cacahoatán, Motozintla, entre otros, los partidos denunciaron que muchos chiapanecos no pudieron votar porque aparecieron en la lista nominal de radicados en el extranjero para la elección del diputado migrante.