Difícil. Los comerciantes prevén una situación difícil en unos meses por las pérdidas en los forrajes. (MARY VÁZQUEZ)
Sobre los apoyos gubernamentales, entre ellos el de la Sagarpa, que se han entregado para "atacar" el pulgón amarillo, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Eduardo Perales consideró que es sólo en el discurso, porque la realidad es que los campesinos están "amolados" por las pérdidas millonarias de la producción.
"Eso de los apoyos que dicen que está dando la Sagarpa, son puras m..." Aquí la cosa está bien fregada y se va a poner peor".
Y es que la pérdida de los cultivos impacta negativamente a los comerciantes, pues sus ventas dependen totalmente de la derrama económica que genera el campo y prevén que durante octubre y noviembre se presentará una situación crítica, derivado de los problemas que se tuvieron en los cultivos de forraje por la plaga, ya que la reserva de dinero que guardan los campesinos se agotará en menos de dos meses.
Recordó que la misma situación se presentó hace cuatro años con la plaga de la araña roja que también devastó los cultivos y provocó el desplome de las ventas a los comerciantes y las instancias gubernamentales, tanto del Estado como de la Federación, no hicieron nada.
"Se va a poner feo. Ahorita hay un poco de circulante, pero en octubre o noviembre las ventas se van a desplomar".
En cuanto a una posible "salvación" para los comerciantes por la producción de algodón, Eduardo Perales consideró que no será así, ya que para que los algodoneros recuperen su inversión pasará mucho tiempo, además de que en este municipio es muy poca la superficie que se siembra la fibra blanca.
"La gente de aquí se va más por la siembra del forraje, porque recupera la inversión más rápido y es mucho más barato sembrar forraje que algodón. Con el algodón pasan tres o cuatro años para que los despepites vendan la producción. Las pacas permanecen almacenadas y con el forraje se tienen dos o tres cosechas al año", dijo.
"No es la primera vez que nos toca un embate como éste, hace cuatro años pasó lo mismo con la araña roja y ¿qué vamos a hacer?, pues nada. Ni modo, hay que "apechugarle", dijo Eduardo Perales.
