Arsenal estaba obligado a ganar en el Stade Louis II por tres goles y le faltó uno, por lo que ayer dijo adiós a la Champions League. Arsenal se queda corto en intento de remontada
Mónaco resistió los embates de Arsenal para clasificarse ayer a los cuartos de final de la Liga de Campeones en virtud de los goles de visitante tras perder de local el partido de vuelta.
Arsenal cantó victoria 2-0 en el feudo de Mónaco y logró nivelar 3-3 el marcador global de la eliminatoria, pero los goles que el club del principado marcó en su victoria 3-1 en el choque de vuelta establecieron la diferencia.
Luego de la humillante derrota en casa hace dos semanas, Arsenal salió decidido a conseguir la remontada.
Olivier Giroud alimentó las esperanzas al abrir la cuenta a los 36 minutos para los ingleses.
El partido tuvo un final dramático luego que Aaron Ramsey aprovechó un mal despeje de Layvin Kurzawa para el segundo gol de la noche.
Pero a los Gunners no le alcanzó el tiempo para anotar el tercero y poder convertirse en el primer club en la historia de la Champions que sortea una eliminatoria tras perder en casa por dos goles.
Arsenal dominó en todas las facetas del partido en el estadio Louis II, abrumando a un adversario que no había encajado goles en sus tres partidos como local en la fase de grupos.
Aunque Mónaco apenas pudo ensayar un remate a puerta en la primera mitad, los subcampeones de la edición de 2004 avanzaron a la ronda de los ocho mejores por tercera vez. Dos equipos franceses estarán en cuartos, ya que París Saint-Germain eliminó a Chelsea la semana pasada.
"Siempre habíamos caído eliminados ante Bayern Múnich y Barcelona en esta etapa. No es por faltarle el respeto a Mónaco, pero estuvimos muy cerca de clasificarnos", se lamentó Ramsey. "Nos complicamos en la ida. Otra vez cerca, pero no alcanzó".
"Sufrimos con el 2-0 en contra. Yo no paraba mirar al reloj en la pantalla gigante, pero los minutos transcurrían muy lentamente", dijo el volante de Mónaco Nabil Dirar. "No pudimos sorprenderles al contragolpe. Nuestro futbol quizás no sea bonito, pero somos un equipo de verdad, unido".
Sobre el final, Subasic intervino providencialmente para tapar un cabezazo del chileno Alexis Sánchez. Todo Mónaco se replegó atrás en los últimos cinco minutos para decretar la eliminación del equipo dirigido por Arsene Wenger, que hasta la fecha tenía un récord perfecto ante clubes franceses en eliminatorias de Champions.
"No supimos aprovechar todas nuestras oportunidades, y acabamos pagando nuestros fallos de la ida", dijo Wenger, quien dirigió a Mónaco durante siete años.