En plena vía pública. El asesinato ocurrió a plena luz del día sobre la prolongación Colón.
Un joven de 22 años murió asesinado de varios balazos, hechos ocurridos al poniente de Torreón el lunes por la tarde.
Fue antes de las 14:00 horas que se activó el llamado Código Rojo en la ciudad ante el reporte de detonaciones de arma de fuego, esto a la altura de la colonia Nueva Aurora.
En minutos se trasladaron hasta el sector elementos de todas las corporaciones de seguridad y hasta paramédicos de la Cruz Roja, quienes encontraron el cuerpo de un joven inmóvil y lleno de sangre en una banqueta de la prolongación Colón y calle Madero.
Paramédicos intentaron sus maniobras de rescate pero fueron inútiles, pues el muchacho ya no contaba con signos vitales, por lo que dieron parte al Ministerio Público.
Testigos indicaron que el joven fue sacado de su domicilio minutos antes por tres hombres armados a bordo de un taxi amarillo, se fueron del sitio a toda velocidad y luego le quitaron la vida a balazos bajo un árbol de la misma prolongación Colón.
El occiso fue identificado como Aarón Arturo Alvarado Rodríguez de 22 años de edad, a simple vista se le observaron heridas de arma de fuego en cabeza y tórax.
Agentes investigadores de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila detallaron que los presuntos agresores lograron irse con rumbo desconocido, y que solamente se recuperaron en el lugar ocho casquillos percutidos del calibre .9 milímetros.
El cadáver fue llevado hasta el Servicio Médico Forense (Semefo) más tarde.
Hallan cadáver
El cadáver putrefacto de una persona fue hallado el lunes por la mañana en los límites de los municipios de Torreón y Matamoros.
Fue minutos después de las diez de la mañana que un ejidatario ubicó en un terreno abandonado lo que parecía ser el cuerpo putrefacto de un hombre, se ubicó justo a la altura del poblado San Miguel, a unos metros del ejido La Joya. El hallazgo ocasionó una movilización de elementos del Ministerio Público y de las diversas corporaciones de seguridad, además del Ejército Mexicano, quienes en cuestión de minutos llegaron al sitio para asegurarlo.
Agentes investigadores de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC) dieron a conocer que los restos se encontraban "boca arriba", que quedaba muy poco tejido y que en su mayoría eran huesos. Detallaron que posiblemente se trataba de un hombre, quien vestía pantalón de mezclilla de color azul y una camisa de color café a cuadros, además de que era imposible determinar si contaba con huellas de violencia debido al avanzado estado de putrefacción.
Los restos fueron enviados más tarde hasta las instalaciones del Semefo para la realización de los estudios periciales necesarios.
