Riesgos. La CNTE amenazó con bloquear la ejecución de la Reforma Educativa.
El Gobierno federal asestó ayer un nuevo golpe a la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en Oaxaca.
La madrugada de ayer cuatro integrantes del gremio fueron detenidos por diversos actos vandálicos y daños a instalaciones federales, y encarcelados en el Penal Federal del Altiplano, con base en órdenes de aprehensión libradas por diversos jueces, varias de ellas por delitos graves.
Asimismo, disidentes que desde el lunes mantenían un plantón frente al Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) fueron desalojados por policías federales y estatales.
Juan Carlos Orozco Matus, Othón Nazariega Segura, Efraín Picaso Pérez y Roberto Abel Jiménez García "El Abuelo", fueron capturados por la Policía Federal en la ciudad de Oaxaca, informaron la PGR y la PF.
La PGR los acusó de la toma violenta de la Junta Distrital en Tehuantepec, la toma de instalaciones estratégicas de Pemex, como la refinería Antonio Dovalí en Salina Cruz, y el Centro de Distribución y Almacenamiento El Tule, en la capital del estado, el pasado 1 de junio.
También les imputa el vandalismo contra la instalaciones de la Octava Región Militar en la capital oaxaqueña y el robo de 10 mil libros de texto gratuito, propiedad de la Secretaría de Educación Pública. A tres de los indiciados los acusaron de delitos federales y a uno por ilícitos del orden común.
Orozco Matus fue detenido con una orden de aprehensión por los delitos de motín, daño en propiedad ajena contra el consumo y riqueza nacional, derivado de su presunta implicación en la toma de la Junta de Distrito y de la refinería de Pemex.
A Nazariega lo acusan de robo agravado contra el consumo y riqueza nacional y daño en propiedad ajena, por la sustracción de los libros de texto y los desmanes en las instalaciones militares; mientras que a Picaso lo encarcelaron por el delito de robo, por la sustracción de los libros.
En el caso de Jiménez García, el único detenido por delito del fuero común, se le acusa de robo calificado, pues le atribuyen apoderarse de componentes de cámaras del C-4 del Gobierno de Oaxaca, con un costo de 531 mil pesos.
SALDO BLANCO
En el operativo para desalojar el plantón del IEEPO no hubo detenidos ni lesionados, informó el Gobierno de Oaxaca.
Alrededor de las 2:45 horas, unos 800 agentes federales y estatales rodearon a los disidentes mientras dormían. Al percatarse del operativo, éstos abandonaron el campamento por su propio pie.
Enseguida, los policías retiraron las lonas y tiendas de campaña donde pernoctaban los manifestantes.
El líder de la Sección 22, Rubén Núñez, acusó represión en contra del movimiento magisterial y responsabilizó al presidente Enrique Peña Nieto y al gobernador Gabino Cué de la reacción de la CNTE ante el desalojo y la detención de cuatro integrantes.
Un grupo de disidentes liderado por Núñez marchó en la capital oaxaqueña, y ante las instalaciones de los juzgados federales exigió la liberación de sus compañeros.