A raíz de los dos escapes de Joaquín Guzmán Loera, mejor conocido como 'El Chapo', de presiones de máxima seguridad, surgen las preguntas sobre qué debe hacerse para que un sistema penitenciario sea realmente “seguro”.
Ni los barrotes, ni los muros, mucho menos la presencia de guardias, impidieron a Guzmán Loera marcharse por un túnel de 1.5km de longitud que daba directo a su celda. Ni tampoco le impidió años atrás escapar en un carrito de lavandería por la puerta principal de una cárcel.
El canal de YouTube de Letras Libres publicó hace un par de días un video que ilustra cómo debe ser construida una prisión de máxima seguridad, además, también muestra los factores que deben cuidarse y que pocas veces son tomados en cuenta.
Según Letras Libres, un centro penitenciario no sólo debe contar un complejo sistema arquitectónico o de ingeniería que imposibilite a un recluso a salir sin ser detectado, debe cuidarse el “factor humano”, que bien podría ser el más importante.
El contacto con los guardias o personal administrativo debe tratarse con delicadeza, pues una simple charla con un custodio podría ser el principio de una fuga o bien, de un botín.
La animación muestra que no siempre basta el separar a los reos por peligrosidad criminal, ni tampoco contar con un gran número de cámaras o guardias.
La producción de Letras Libres publicó una animación donde exponen varios puntos a tratar sobre seguridad en prisiones. (YOUTUBE)