Mauro Boselli ya no ocupará plaza de extranjero en México. (Jam Media)
El incremento de futbolistas naturalizados en la Primera División no se detiene.
Previo al Apertura 2015 se registró la cifra histórica de 54 elementos que adquirieron la nacionalidad mexicana, en el transcurso del torneo aumentó el número y para el Clausura 2016 habrá más, pues Mauro Boselli (León) y Paulo Da Silva (Toluca) se unieron a la lista de "adoptados" por el país azteca.
Desde el Apertura 2014, los naturalizados pueden jugar sin restricción. Antes no podían ver acción en la cancha como mexicanos si no habían participado en al menos 10 torneos; ahora pueden hacerlo tras cuatro.
Una vez quitados los candados, el número de jugadores que tienen a México como su segunda patria ha aumentado: 35 en el Apertura 2014, 42 para el Clausura 2015 y más de medio centenar para el Apertura 2015 que recién terminó.
Tan sólo en el reciente duelo de la final entre Pumas y Tigres saltaron al terreno de juego ocho naturalizados; el líder de goleo, Emanuel Villa, también lo es y todos los clubes, excepto Chivas, cuentan con al menos un jugador con esas condiciones.
América, por ejemplo, será uno de los equipos con más naturalizados en el Clausura 2016 al sumar 6 tras la incorporación de William Da Silva. La lista la completan Osvaldo Martínez, Pablo Aguilar, Rubens Sambueza, Darío Benedetto y Darwin Quintero.
Más que amor por México, los jugadores obtienen su carta de naturalización para dejar de ocupar puestos de extranjero.
El reglamento de competencia permite que un equipo registre hasta cinco jugadores importados, así como una cantidad ilimitada de naturalizados.