El spa es un must que no debe pasarse por alto.
La península de Bukit en Bali ha sido considerada durante siglos como sitio de especial veneración, pues alberga a uno de los santuarios más importantes de la isla: el Templo de Pura Luhur Uluwatu, excavado en la piedra del acantilado.
Dice la leyenda, que el propio templo es un barco convertido en piedra y que, desde entonces, las comunidades de pescadores de la región lo han reverenciado como el lugar de culto de Dewi Laut, la diosa del mar.
Es en este místico y exótico setting, apartado del resto de la isla y que en otra época fuera también coto de caza de la realeza balinesa, donde se sitúa Bulgari Resort Bali. Un "place to be" para "honeymooners" o parejas en plan romántico, que se extiende sobre casi nueve hectáreas, a más de 150 metros de altura sobre el litoral del Océano Índico.
Su diseño es una interpretación contemporánea del tradicional estilo balinés con el característico look italiano de Bulgari, incorporando elementos naturales y culturales autóctonos.
Amplias y de sofisticada elegancia, las 59 villas con vistas al océano disponen de alberca y jardines tropicales independientes. Cuatro de ellas son sin embargo, la máxima expresión de lujo, con sorprendentes espacios que van desde mil 700 hasta más de cuatro mil metros cuadrados; sin duda, perfectas para unas largas vacaciones desconectándose de todo.
Para quienes quieran explorar el entorno, se recomienda solicitar la asistencia del leisure concierge. Desde excursiones de un día hasta paseos en helicóptero a las islas y los volcanes vecinos, pasando por actividades holísticas, recorridos por los mercados locales o concertar a un personal shopper, este personaje se encargará de que los servicios elegidos se lleven a cabo de acuerdo a lo solicitado, evitando en todo lo posible cualquier contratiempo.
Sin dejar a un lado ni un solo detalle, la gastronomía del resort es ideal para aquéllos que buscan una auténtica experiencia sensorial, pues fusiona acertadamente la esencia de la cocina italiana e indonesia con una carta de vinos que no tiene nada que envidiar a otros grandes restaurantes del mundo.
El spa es un must que no debe pasarse por alto. Basado en una filosofía del bienestar influenciada por costumbres y técnicas asiáticas tradicionales, el concepto holístico de su menú de servicios se enriquece con la aplicación de modernas prácticas y productos naturales desarrollados por ESPA. Imperdibles: tratamientos estrella de Bulgari, ritual balinés y ayurvédico.