Analísis. Jeb Bush tuvo un mejor desempeño en el último debate, ante las confrontaciones con Donald Trump.
Los senadores Ted Cruz y Marco Rubio protagonizaron un fuerte choque sobre seguridad nacional e inmigración en el debate presidencial republicano, que colocó su enfrentamiento en el primer plano de la contienda por la candidatura, mientras que el exgobernador de Florida Jeb Bush, el quinto debate fue la oportunidad de encontrar terreno firme luego de meses de presentaciones flojas.
Donald Trump, que encabeza las encuestas, defendió con firmeza su consigna provocadora de prohibir el ingreso de musulmanes a Estados Unidos con el argumento de que "no se trata de religión, se trata de seguridad". Jeb Bush se mostró más suelto que en los debates anteriores al atacar a Trump, aunque no está claro si esto alcanzará a modificar la trayectoria de una campaña morosa. El debate fue el primero entre republicanos desde los ataques en París y San Bernardino, California, que acentuaron el miedo al terrorismo en Estados Unidos. Los ataques han generado un debate sobre la campaña del presidente Barack Obama contra el Estado Islámico en el Medio Oriente y las medidas de seguridad para prevenir ataques en territorio estadounidense.
La propuesta de Trump de vedar temporariamente el ingreso de musulmanes a Estados Unidos, fuertemente criticada por sus rivales, dominó buena parte de la discusión durante el debate y a la mañana siguiente. "No tiene un plan, no es un candidato serio", dijo Bush ayer a la televisora MSNBC. "La idea de que uno puede aprovecharse de los miedos de la gente no nos representa como nación, no nos representa como partido". En un pasaje posiblemente destinado a aliviar los temores de la conducción republicana, Trump juró que no se presentará como independiente. Algunos temen que si no obtiene la candidatura tomará esa decisión, lo que atentaría contra las posibilidades de derrotar al candidato demócrata. "Estoy totalmente comprometido con el Partido Republicano", dijo Trump.
Cruz y Rubio, lejos de criticar a Trump, optaron por atacarse mutuamente, sobre todo en materia de inmigración y seguridad nacional. "Podría decir anoche u hoy que vamos a destruir totalmente a ISIS, los vamos a reventar, vamos a provocar resplandor en la arena", dijo Rubio en un acto en Iowa el miércoles, en alusión a declaraciones de Cruz, a quien no nombró. "Es fácil decirlo. "¿Con qué lo harás? Necesitas los medios para hacerlo. Nos estamos quedando sin esos medios". Rubio, senador por Florida, defendió su apoyo a dar una vía hacia la ciudadanía a inmigrantes que se encuentran en situación irregular en el país, una posición que la amplia mayoría del Partido Republicano rechaza de plano.
Se defiende
Donald Trump sigue adelante.
⇒ El empresario repelió varios ataques de sus rivales.
⇒ Se centró en los malos resultados de Bush en los últimos sondeos.
Noticias relacionadas
Siglo Plus